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CIUDAD DE MÉXICO., 7 de septiembre de 2019.- Acudir a la Unidad de Medicina Familiar cuando se presente sintomatología gripal, fiebre y salpullido, permitirá identificar con oportunidad a niños y niñas con varicela, indicó el doctor Juan Carlos Martínez Vivar, Coordinador de Programas Médicos de la División de Prevención y Detección de Enfermedades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Explicó que la varicela es una enfermedad viral aguda que suele ser contagiosa y que se presenta generalmente en la edad escolar, por lo que en el regreso a clases se debe poner atención en la salud de los menores y visitar al médico cuando se conozca de algún caso al interior del aula.
Informó que el IMSS atiende en promedio 63 mil casos de varicela al año, en todos los grupos de edad, siendo los grupos más afectados las niñas y niños de uno a catorce años de edad, en quienes se concentra el 63.2% (39,878) de los reportes efectuados a los sistemas de vigilancia epidemiológica. En guarderías institucionales, esta enfermedad ocasiona cerca del 80% del total de brotes notificados.
En cuanto a la presentación clínica del padecimiento, explicó que hay tres etapas, la primera de ellas aparece con un cuadro gripal con dolor de cabeza, malestar general y fiebre; la segunda, con la aparición de máculas o pequeñas ronchas que evolucionan a vesículas con líquido, en la tercera, éstas se rompen y forman una úlcera que cicatriza y crea una costra que se desprende por sí sola al paso del tiempo.
Detalló que el salpullido empieza en forma de pequeñas manchas rojas ligeramente elevadas, y que suelen presentarse primero en la cabeza y en la espalda, para extenderse por todo el cuerpo.
Añadió que una vez que una persona se ha contagiado y presenta los primeros síntomas pueden pasar entre 5 y 15 días para que aparezca la erupción y que el desarrollo de la infección hasta su conclusión, toma alrededor de otros 10 días más, por lo que la enfermedad llega a extenderse aproximadamente 30 días hasta desaparecer.
El especialista del Seguro Social recomendó que en tanto se cuente con un diagnóstico certero de la enfermedad emitido por un médico, es muy importante no rascarse para prevenir que las vesículas se infecten, mantener las manos y uñas limpias y evitar el contacto con mujeres embarazadas para controlar el contagio.
En este sentido, dijo que la enfermedad se puede transmitir por tos o estornudos, por contacto directo con la piel, por saliva o por contacto con superficies contaminadas y en el caso de la mujer en periodo de gestación a su bebé durante el parto.
Señaló que entre los grupos vulnerables a la varicela se encuentran quienes no han padecido la enfermedad, así como quienes enfrentan alguna inmunosupresión temporal o enfermedad crónica.
Por lo que, enfatizó que en cuando un menor manifieste no sentirse bien o presente los síntomas descritos, es importante que sea revisado por su médico familiar.
El tratamiento dijo, se basa en la atención a la comezón y el control de la temperatura y solo en casos que representen riesgo de alta complicación, con la prescripción de un antiviral.
Actualmente, las niñas y niños que acuden a guarderías del IMSS, reciben esta vacuna para reducir el riesgo de contagio, ya que representa la forma más efectiva de prevenir brotes de la enfermedad.