Líneas Quadratín
Absortos en los resultados de los recientes comicios, donde Morena ganó 4 de 6 gubernaturas, nos olvidamos de Oaxaca, entidad del sureste del país y fuertemente castigada por el primer huracán de la temporada: Agatha.
La cifra de muertos no ha cambiado (nueve hasta el momento), pero conforme se avanza al interior de las tierras serranas se observan incuantificables daños materiales y la pérdida total de viviendas y patrimonio de quienes menos tienen, y hoy se han quedado sin nada de nada. Hoy con claridad se sabe que son 25 municipios los afectados, donde se ubican cerca de 20 mil localidades.
No es de extrañarse la falta de ayuda o que esta llegue a cuenta gotas. El Fondo Nacional de Desastres (Fonden) ya no existe y sus recursos fueron destinados a “otras prioridades”. Así, diversas comunidades, la mayoría de indígenas y campesinos, permanecen aún aisladas, apartadas, incomunicadas y sin auxilio. Carreteras, caminos rurales, terracerías y brechas quedaron destrozadas o desaparecieron por la furia del agua y los vientos huracanados. Casas, utensilios, animalitos y el poco patrimonio que poseían quedaron sepultadas bajo toneladas de lodo.
Tampoco es de extrañarse que en Oaxaca se haya registrado el mayor abstencionismo de la reciente jornada electoral –62 por ciento—lo que significa que el morenista Salomón Jara, gobernará con sólo un tercio del apoyo y la simpatía del electorado oaxaqueño. Una cifra que lo pone en situación vulnerable y poco agraciada, pues si bien es cierto que le quitó el estado al PRI, la disputa interna de Morena lo dejó muy mermado. Mucha gente del morenismo quería a Susana Harp, quien, disciplinada y para no provocar fracturas, optó por hacerse a un lado, no sin antes dejar ver el machismo de dicha agrupación política.
Por cierto de los que votaron por Morena para dirigir a la entidad los próximos seis años, el 61 por ciento son adultos mayores de 50 años, lo que significa que una buena franja de oaxaqueños no creen en el lopezobradorismo y su propuesta para sacarlos de pobres, más aún luego de ver que el mandatario envío al Ejercito a las tareas de socorro y a la titular de Bienestar a levantar el censo de los daños. La frase del titular del Ejecutivo federal en una de sus tantas mañaneras, sobre de que ya “mandamos ayuda para que puedan votar” no cayó nada bien entre los afectados, que buscan sus escasas pertenencias bajo el lodo y los escombros.
El comunicado más reciente de la secretaría del Bienestar señala que están en la entidad realizando recorridos, “visitamos el CAC “Agricultor Costeño”, del programa Sembrando Vida, quienes en su mayoría son adultos mayores afectados por el huracán Agatha. Son aproximadamente 800 brigadistas de la Secretaría de Bienestar quienes recorren todas las localidades de los municipios afectados. Lo hacen casa por casa para llevar a cabo el Censo Bienestar; por lo que recomiendan a la población estar pendiente de la visita de las brigadas a su domicilio para ser censada y pueda llegar la ayuda.
La tarea es titánica para estos brigadistas, pues se estima hay aún unas 20 mil localidades aisladas por los deslaves en montañas, caminos destrozados, alzas de corrientes pluviales, así como caminos de terracería y brecha desparecidos por las fuertes corrientes en los ríos. Oaxaca tiene una de las orografías más accidentas por sus montañas y sierra.
El lunes pasado, el aún gobernador de la entidad Alejandro Murat, de bandera priísta, anunció que se otorgarán créditos para reactivar las zonas turísticas, en tanto que el presidente López Obrador aseguró que apoyará a la reconstrucción de casas. También y luego del análisis del desastre, a media semana se optó por declarar en estado de emergencia a 25 municipios y poder acceder a los recursos del Programa para la Atención de Emergencias por Amenazas Naturales.
Así, los créditos anunciados para zonas turísticas se centrarán en las zonas turísticas de Zipolite, Mazunte, San Agustinillo y Puerto Ángel.En tanto que los que provengan de dicho programa irán para municipios ubicados en la sierra.
El Gobierno Federal reiteró a su vez que desplegará la ayuda a partir de los resultados del censo de población afectada y que estarán disponibles entre el jueves y el viernes de la siguiente semana. Dicho censo se encarga de recopilar información tanto de casas como de cultivos, enseres y comercios afectados por la fuerza de Agatha. Los datos preliminares señalan que alrededor de 17 mil casas, en su mayoría de lámina, fueron dañadas.
También se registraron afectaciones en más de 80 mil hectáreas de café de especialidad en el municipio de Pluma Hidalgo y en 40 mil hectáreas de cultivo de papaya en Tonameca.
Así la dimensión de la tragedia en Oaxaca no puede aún dimensionarse, pues no hay accesos a muchas comunidades y el censo va en curso. Me queda claro que la recuperación de Oaxaca llevará largos y difíciles meses.