Trump tiene su modo
En el gobierno de López Obrador, uno de los sectores sociales más relegados, maltratados y castigados, son las mujeres.
Y es que el régimen de AMLO es una suerte de “talibán tropical” que coloca a las mujeres en el último estrato social, sin derechos y, sobre todo, empujadas a permanecer en casa, alejadas de los ojos del mundo.
¿Recuerdan cuando López dijo que las mujeres debían estar en casa cuidando a los hijos?
¿Recuerdan cuando Obrador dijo que las mujeres tenían la obligación de cuidar a los abuelos?
Lo cierto es que el maltrato a las mujeres es y sigue siendo frecuente en la vida política de López Obrador.
Y el caso más reciente fue la satanización que hicieron en redes “los talibanes” de AMLO; hordas babeantes que se lanzaron contra la escritora Brenda Lozano, recién nombrada Agregada Cultural de México en España.
Sí, resulta que la colaboradora de Letras Libres fue designada al cargo en sustitución del también escritor Jorge F. Hernández, echado por criticar al consentido de Palacio, Marx Arriaga.
Curiosamente la designación de Brenda Lozano desató la furia de “talibanes” como Álvaro Delgado, Pedro Salmerón y Antonio Attolini –entre muchos otros–, quienes crucificaron a la novelista por haber cometido el “pecado capital” de burlarse del presidente a través de memes.
Es decir, que el régimen “Talibán” de AMLO no tolera el humor, no se permite disentir y no se perdona la crítica al amo “Talibán”
Y en el colmo, el propio Obrador se lanzó contra la escritora, a quien acusó de pertenecer “al régimen neoliberal y conservador”.
Luego dijo: “es muy difícil encontrar en el aparato administrativo gente que no esté relacionada con académicos, con intelectuales, que dominaron durante mucho tiempo; tardó más el predominio neoliberal que el Porfiriato”.
Días antes se había producido otro ataque brutal contra otra mujer en el actual gobierno, cuando el aliado criminal de AMLO, el (CJNG) amenazó de muerte a la conductora de Milenio, Azucena Uresti.
¿Por qué la cobardía y la barbarie del “Talibán” (CJNG), contra una mujer de los medios?
Todos conocen la respuesta; porque el gobierno de López es aliado de bandas criminales como el citado Cártel.
Pero días después la cobardía del gobierno de AMLO siguió contra la conductora de Milenio, cuyo nombre y espacios informativos siguieron siendo señalados en las “mañaneras” del “Talibán de Palacio”.
Y no es novedad el odio de López contra las mujeres. En realidad, viene de lejos.
1.- Por ejemplo, entre la llamada izquierda mexicana, muchos recuerdan el caso de una mujer dedicada a la política; legisladora y compañera de partido de AMLO, de nombre Ruth Zavaleta, y a quien el entonces líder del PRD y hoy presidente insultó de manera pública, sólo por ser mujer.
2.- El 13 de agosto se cumplieron 2 años de la persecución, prisión y juicio ilegales lanzados desde el poder presidencial contra Rosario Robles, ex jefa de gobierno del DF y a quien AMLO debe el despegue nacional de su carrera política.
Robles está en prisión “por el delito de ser mujer” –como ella misma lo ha dicho–, y por haber derrotado a López en distintos esgrimas políticos.
Peor aún, para convertirla en presa política, el presidente se valió de verdaderos “talibanes” de su iglesia, llamada Morena.
Si, resulta que un juez, sobrino de René Bejarano, falsificó una licencia de conducir para simular que Robles se podría fugar. Así la mando a prisión.
Todo el peso del rencor presidencial contra una mujer.
3.- Pero millones de mujeres mexicanas resultaron dañadas cuando López Obrador destruyó las estancias infantiles y engañó a miles de familias que utilizaban dicho servicio.
En realidad, canceló el futuro de miles de mujeres y niños que tenían en las guarderías la promesa de un mejor futuro; mujeres y niños que, de tajo, debieron modificar su estilo de vida por la mezquindad presidencial.
4.- Pero ese sólo era el principio ya que López también destruyó los refugios para mujeres y obligó a miles de víctimas a regresar al infierno que vivían con sus parejas violentas. De nuevo el presidencial contra las mujeres.
5.- De igual manera, el gobierno de Obrador ignoró los focos rojos sobre la violencia contra las mujeres en México. Pero cuando esa violencia se tradujo en un creciente número de feminicidio, queda claro que las mujeres no le importan al gobierno federal y menos a los gobiernos estatales de Morena.
Hoy son de escándalo las cifras de feminicidios en todo el país, pero, sobre todo, en la Ciudad de México, en donde cada 24 horas se cometen, en promedio, un total de 11 feminicidios.
6.- Más aún, a causa de la urgencia oficial por regalar dinero publico para la compra de votos, el presidente ordenó cancelar el programa Prospera-Oportunidades, que tenía como objetivo reducir la tendencia que limita la educación para las niñas, sobre todo en estados como Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Puebla e Hidalgo. Hoy esas niñas tienen un futuro negro.
7.- Todo ello a pesar de que en la elección presidencial de 2018 votaron a favor de AMLO poco más de 13 millones de mujeres, lo que representa el 49 por ciento de los 33.3 millones de votos totales que recibió el tabasqueño.
Es decir, que, en promedio, uno de cada dos votos que llevaron a Obrador al puesto de presidencial salió de una mujer.
¿Y cual fue la respuesta de López Obrador?
Convertir su gestión en remedo del “Talibán”; el mismo que desprecia, humilla y reprime a las mujeres.
¿Hasta cuándo entenderán las mujeres que votaron por un “Talibán”?
¿Hasta cuándo tolerará la sociedad mexicana al “Talibán de Palacio”?
Al tiempo.