¿Eres un ser visual?

MM Diana Estefanía Hernández Martínez

Directora de Programa de la Licenciatura en Tecnología y Producción Musical

Muchas personas creen ser seres visuales, creen que sus ojos son los órganos sensoriales más importantes. Pero en realidad, nuestro sistema auditivo es el primero en desarrollarse, dependemos del sonido mucho más de lo que pensamos.

Incluso antes de nacer, nuestro sistema auditivo ya está funcionando. A las 16 semanas de embarazo, el feto ya puede oír sonidos. Después del nacimiento, nuestro sistema auditivo sigue desarrollándose rápidamente. A los pocos meses, ya somos capaces de distinguir entre distintos sonidos e incluso de reconocer la voz de nuestra madre. Esto se debe a que nuestro cerebro está programado para prestar atención a los sonidos desde una edad muy temprana.

A medida que crecemos, seguimos dependiendo en gran medida del sonido. Piensa, por ejemplo, en sus canciones favoritas. Cuando escuchas tu canción favorita una canción que te gusta, tan solo con escuchar el inicio la puedes reconocer y evocar sentimientos o recuerdos que se sienten en todo tu cuerpo. Esto se debe a que la música puede impactar nuestras emociones como pocas otras cosas pueden hacerlo. Puede hacernos sentir felices, tristes o nostálgicos, todo a través del sonido.

El sonido también es muy importante para contar historias. Cuando escuchamos una historia, ya sea un podcast o un audiolibro, podemos sumergirnos en la narración de una forma que no siempre se consigue leyendo un libro. El tono, la inflexión y el ritmo de la voz del narrador añaden una nueva dimensión a la experiencia.

Por supuesto, la visión sigue siendo muy importante para nosotros. Dependemos de ella para navegar, identificar objetos y muchas otras cosas. Pero es importante reconocer que nuestro sistema auditivo es igual de crucial, si no más, en muchas situaciones.

En conclusión, nuestro sistema auditivo es mucho más importante de lo que solemos creer. Desde antes de nacer, dependemos del sonido para entender el mundo que nos rodea. Así que la próxima vez que sientas la tentación de decir que eres una persona visual, recuerda que tus oídos son tan importantes como tus ojos.