QUERÉTARO, Qro., 24 de septiembre de 2020.- A través de denuncia anónima, se reportó a Quadratín de despidos irregulares que abarcarían a una tercera parte de los más de mil trabajadores del Corporativo Santander.

A los trabajadores no se les pagó la última quincena y que mientras se encontraban en las instalaciones, la mañana del 23 de octubre, se les fue llamando de uno por uno con un abogado externo, quien les afirmaba que requería la corporación volverlos a contratar, pues únicamente así les podría entregar prestaciones. Todos ingresaron a laborar tras ser contratados por una empresa de subcontratación.

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Desde que llegan al corporativo Santander, de 5 de febrero, todos deben dejar su celular en los gabinetes de la entrada, por lo cual se encontraban incomunicados cuando se les ordenaba firmar una hoja de despido voluntario, esta con la promesa de que después serían recontratados.

Se encontraban trabajando de manera regular cuando de tres en tres los empezaron a llamar a que se presentara ante un abogado que nunca habían visto, quien les afirmaba que únicamente podrían ser recontratados si es que primero firmaban su separación. Ante las quejas de trabajadores, hasta gritos, empujones y palabras altisonantes se registraron contra trabajadores.

La información que se les proporcionó fue que se despediría mil personas, tanto del corporativo en 5 de Febrero como en el de Bernardo Quintana.

Los despidos también alcanzaron a los escasos elementos a quienes se les permitió trabajar desde casa, y a quienes obligaron a regresar el equipo al corporativo.

A todos se les prometió un finiquito conforme a la ley, pero este fue menor de la que correspondería, por lo cual trabajadores planean generar una denuncia.

En contraste de los despidos, también se informó que la empresa ya inició a contratar a otras personas para ocupar los nuevos cargos, claro que con salarios menores, pues se empieza con poco más de 2 mil 500 pesos a la quincena, salario que incrementa conforme suman ventas.

Otra irregularidad que se denunció es que nunca se genera antigüedad, pues cada año que un trabajador quiere irse de vacaciones, debe firmar su baja.