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CIUDAD DE MÉXICO, 17 de junio de 2019. — Derivado de sus investigaciones con el veneno de alacrán, científicos de la UNAM descubrieron un antibiótico contra la tuberculosis. Se trata de dos compuestos capaces de combatir a cepas de esta afección, resistentes a antibióticos, y a la bacteria Staphylococcus aureus, también conocida como estafilococo dorado.
Además, son efectivos para inhibir el crecimiento de células cancerígenas como: Jurkat (leucemia de células T), TE 671 (células de rhabdomiosarcona) y SH-SYSY (neuroblastoma de médula ósea), sin causar daño a células del tejido pulmonar.
Los expertos del Instituto de Biotecnología (IBt) aislaron, produjeron y patentaron ambos compuestos, con potencial para ser utilizados como fármacos contra tuberculosis, considerada la enfermedad más letal del mundo, pues cada día mueren 45 mil personas, y es contraída por aproximadamente 30 mil, aunque es prevenible y curable, resaltó Lourival Domingos Possani Postay.
Desde hace más de cuatro décadas, el equipo Possani Postay ha estudiado la estructura de los venenos de alacranes de México y 16 naciones más. Este trabajo ha permitido el reconocimiento del investigador, nacional e internacionalmente, por sus contribuciones al desarrollo de antivenenos de última generación.
En 2016, el Centro Nacional de Programas Preventivos y Control de Enfermedades (CENAPRECE) reportó dos mil 569 muertes por tuberculosis en México, y 21 mil 184 nuevos casos en todo el país.
Veracruz, Baja California, Guerrero, Tamaulipas y Sonora son los estados más afectados. El tratamiento contra esta enfermedad dura aproximadamente seis meses, por lo que los pacientes lo abandonan; con ello generan cepas resistentes que requieren de mayor cantidad de antibióticos y extender la medicación hasta por cuatro años. Los nuevos compuestos universitarios pueden contribuir a resolver este problema, un paso importante desde el punto de vista de la salud pública.
“El trabajo en laboratorio, con modelos biológicos, ya está hecho y funciona; ahora se requieren ensayos clínicos en humanos, y una farmacéutica que se interese puede hacer llegar este producto a la gente”, subrayó Possani.
El primero de los compuestos descubiertos es de color rojo, y fue llamado 3,5- dimethoxy-2-(methylthio) cyclohexa-2,5-diene-1,4-dione. Pruebas en laboratorio demostraron que es efectivo contra Staphylococcus aureus, bacterias causantes de infecciones en la piel, sepsis, endocarditis y neumonía.
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