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Vecinos de la colonia Campo Militar denuncian que las autoridades no responden a la línea de emergencia, por lo que se ven en la necesidad de defenderse por sus propios recursos.
QUERÉTARO, Qro. 19 de septiembre de 2015.- Alberto Suárez, vecino de la colonia Campo Militar, asegura que él no estaría dispuesto a entregar su arma en la campaña de despistolización porque es su único modo de defensa ante los actos de violencia y amenazas recurrentes que se viven en esa zona.
Esto luego de que el comandante de división Diplomado Estado Mayor (DEM), Felipe Gurrola Ramírez, refiriera que la Campaña de Canje de Armas ha mostrado buenos resultados. “Aquí en Querétaro como afortunadamente los índices delictivos no son tan elevados como otras entidades se refleja en menor medida el Canje de Armas”, señaló el comandante.
Por otra parte, Alberto Suárez denunció que las autoridades no acuden a los llamados que realizan cuando hay actos delictivos y, por esta misma razón, los vecinos se han visto obligados a defenderse con sus propios métodos.
“Cuando llamas al 066 ¿qué crees que te van a mandar una patrulla o una ambulancia?, te mandan una ambulancia. Porque les dice que están golpeando a un señor y te mandan una ambulancia media hora después, en lugar de una patrulla”, dice Alberto.
Según el vecino afectado, siempre ha existido violencia pero responsabiliza al secretario de Seguridad Pública Municipal, Héctor Benítez, del empeoramiento de la atención policíaca a la zona durante esta última administración.
“Yo en enero por radio me enfrenté con el señor Benítez porque él decía que teníamos una ciudad muy segura”, afirma el señor Suárez.
Tanto Alberto como sus vecinos han sido víctimas de asaltos a mano armada y amenazas, su esposa Silvia Jiménez dice que ni entre ellos se pueden defender por sus vidas porque corren peligro.
“Yo no defiendo a nadie porque le va peor al que se entromete, los delincuentes tienen armas y tanto en el día como en la noche está en peligro tu vida”, dice Silvia.
De acuerdo a esta pareja, la única salida que les queda es no dejar de levantar la voz para que sus denuncias sean escuchadas.