Líneas Quadratín
Movilidad Urbana. Migración, Avisos y decisiones
La madre naturaleza y la toma de decisiones políticas-sociales-económicas, parece cada vez se tienen que tomar más fuerte de la mano, recientes acontecimientos han cimbrado distintas sociedades en diferentes lugares del mundo.
Un terremoto en Ecuador de 7.8 grados escala de Richter, que ha tomada la vida de más de cuatrocientos hermanos ecuatorianos, en Japón de 7.3 grados tiene al momento casi doscientas personas entre muertos y desaparecidos. Dos avisos más.
Todo ello nos invita a reflexionar en varias cosas, de las recientes fallas en la infraestructura y en las edificaciones que provocaron tantas muertes en Ecuador, esto es, estamos seguros que en lugares donde no han sido recurrentes este tipo de problemas, podemos enfrentarlos; nuestra ciudad recibió también parte del terremoto del 85 en la ciudad de México, en aquel entonces una todavía muy horizontal ciudad, nos hace pensar si las nuevas torres, que están multiplicándose en la periferia del cuadro central y zonas altas, estén debidamente diseñadas para resistir los más frecuentes y más violentos avisos de la naturaleza.
Y si sumamos a estos eventos, las recientes contingencias ambientales en la ciudad de México, como en otras ocasiones a China, nos falla el viento limpiador y, nos damos cuenta que no entendemos la importancia de tomar medidas radicales y corregir el rumbo. De entre las recurrentes fallas, seguimos priorizando a los vehículos automotores no gravando bien su uso (más allá de la posesión), construyendo más y más vialidades, o aumentando en su capacidad a las ya existentes, así como el libertinaje de los desarrolladores y la falta de visión urbanística de la zona metropolitana.
Urge acelerar el paso en el trasporte público, está claro que no se deben tomar medidas precipitadas, pero aun así se tienen que ofrecer de manera urgente, las alternativas que hagan que la gente se baje de los vehículos particulares y de un solo pasajero; que si al ya de por si enorme parque vehicular que coexiste en la ciudad, hay que sumarle los que vienen con las 15 o 20 o 70 familias que llegan a nuestro estado, que hacen necesarias esas medidas radicales, alternativas, incentivos y cargos.
Y es a colación de todo esto, cómo han salido a relucir la difíciles decisiones que se han tomado en la alcaldía capitalina, que no sale de una bronca cuando inicia un nuevo proceso de controversia, el asunto de los parquímetros, que tiene un buen significado en el sentido de desincentivar el uso de vehículo privado, aunque pendiente de resolver el asunto de la concesión y el beneficio económico del uso del espacio público, que debe ser para los dueños del espacio público, o sea todos los ciudadanos; y para novedad el asunto de la basura, que el problema no está exclusivamente en la concesión, buena parte está en el costo de ella, que si se habla de un ahorro inicial de 17 millones de pesos, lo cual no ha parecido suficiente para alentar a la opinión pública, que al más sentido estilo de Martín Esparza reniegan del asunto privatizador, en un espíritu anti-capitalista casi al eco de que estaríamos mejor con López Obrador; sin reparar en el problema principal que radica en que se va seguir haciendo con esos desechos, seguir utilizando un relleno sanitario rebasado, seguir sin obligar a la ciudadanía a separar la basura, a capitalizar el poder reciclar enormes cantidades de productos reciclables, a reparar en el costo y el beneficio económico que deberá ser para mejoramiento de nuestra ciudad, porque del beneficio ambiental ni decimos, ya hay suficientes avisos de la madre tierra.
Por ello y por ahí unos inquietos andan organizando un ciclo de conferencias La Nueva Responsabilidad Ambiental en México, ya veremos la seriedad y el alcance.