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Acusa ombudsman Miguel Nava a diputados de desprecio, antipatía y falta de interés al no obtener respuesta sobre la creación de este Consejo en la Legislatura.
QUERÉTARO, Qro., 31 de agosto de 2015.- La Defensoría Estatal de los Derechos Humanos de Querétaro emitió un informe especial a la LVII Legislatura Local, luego de que solicitó en cuatro ocasiones la conformación del consejo de este organismo, sin obtener respuesta, lo que se consideró un “desprecio”, antipatía y falta de interés hacia la Defensoría.
Al exhortar nombrar a los consejeros honoríficos, el presidente de la Defensoría, Miguel Nava Alvarado señaló que no se atendieron las peticiones de esta integración, lo que causa una afectación al trabajo de este organismo.
“No han nombrado a los miembros del consejo generando una afectación en el ejercicio de sus funciones administrativas de transparencia y rendición de cuentas”, subrayó.
Afirmó que “no existe ningún interés de nombrar a estos consejeros”, ya que el pasado 28 de mayo solicitó, por primera vez, la nominación de cinco personas a la presidencia de la Mesa Directiva de la LVII Legislatura local.
El 16 de junio se envió un oficio a al diputado local Guillermo Vega Guerrero, presidente de la Junta de Concertación Política, a quien se le mandó otro oficio el 30 de junio de 2015, donde se le insistió en la necesidad de nombrar a los consejeros, pero en esta ocasión la Legislatura estaba cerrada por vacaciones.
El 13 de agosto de 2015 tres de los siete miembros del Consejo se remitió un nuevo oficio al diputado a Guillermo Vega misiva para solicitar por cuarta ocasión elegir los perfiles de las personas.
“La omisión del Congreso queretano denota la falta de interés para conformar al Consejo, imposibilitando al organismo llevar a cabo actividades de transparencia y rendición de cuentas. La omisión de las y los diputados afecta la actuación del organismo defensor”, declaró.
Actualmente de las seis personas que debe elegir la Legislatura Local solamente hay dos personas que conforman este consejo, lo que consideró un “claro desprecio” hacia la Defensoría.