Constitución, pilar de las instituciones; llama Peña al consenso
Reconocen déficit por rezagos sociales, desigualdad y pobreza
QUERÉTARO, 05 de febrero de 2016.- El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, José de Jesús Zambrano Grijalva, exhortó a honrar a los constituyentes con una visión de estado para diseñar la constitución del siglo XXI como un nuevo pacto social y político.
Subrayó que la constitución de 1917 fue resultado de la revolución de 1910 que tradujo la fuerza revolucionaria como un gran pacto social y constituye un gran proyecto de nación con base en la ley y la democracia.
Reconoció que en centenares de ocasiones se modificó para recoger reclamos de nuevos derechos de la sociedad, de manera que se lograron reformas que significaron “verdaderas reformas pacíficas”, garantistas y congruentes con los constituyentes de 1917.
Sin embargo, admitió que hubo reformas que contravinieron los principios constitucionales y fueron altamente controvertidas, sin la base de consensos entre las principales fuerzas políticas del país.
Por ello, dijo, el país está obligado a reflexionar sobre los retos del siglo XXI, porque si bien siguen presentes los principios sociales de la Constitución de 1917, aún no se hacen realidad muchos de ellos, ya que se tiene déficit en los hechos, con rezagos sociales, desigualdad y pobreza, así como falta de oportunidades para las nuevas generaciones, reconocidos índices de corrupción e impunidad y graves problemas de seguridad.
“La mejorar manera de honrar a los constituyentes con una visión de estado para diseñar la constitución del siglo XXI como un nuevo pacto social y político, por un lado habrá que decir, armonizar la vida real, el equilibrio de poderes que hoy tenemos como resultado de una mayor competencia política y una pluralidad que llegó para quedarse”, afirmó.
Frente a quienes plantean la solución de los problemas como una manera de regresar al texto inicial de la Constitución, consideró que eso significaría no reconocer que la sociedad cambió.
Consideró que el debate principal se centra en armonizar y actualizar el sistema político con los contrapesos reales, porque hay que centrarse con una visión de estado para la constitución del siglo XXI.