¿Justicia o impunidad?

La FGR informó que el General Salvador Cienfuegos, ex secretario de la Defensa con Enrique Peña Nieto, no es un delincuente peligroso al servicio del narco-crimen, como sostenía la DEA y que motivó su detención en Estados Unidos.

No presentar cargos contra Cienfuegos, por presuntos delitos fabricados por la DEA, fue decisión de la FGR, respaldada por el gobierno.

–¿Sólo respaldada?

–¿Alejandro Gertz Manero queda de florero?

La exoneración al general es explosiva.

Por un lado, podría verse como un asunto de justicia porque allá le inventaron delitos quizá con fines electoreros, sospecha el presidente; ordena publicar el expediente de la DEA para que la gente vea.

Pero, por otro lado, la amnistía jurídica para quien fuera “jefe de jefes” en la milicia nacional también podría verse como un asunto de impunidad.

En esta administración las Fuerzas Armadas hacen de todo. El empoderamiento militar no se cuestiona.

–¿Por eso el gobierno se le cuadra?

Cuando Estados Unidos privilegió la relación bilateral y por razones diplomáticas se autorizó la repatriación del acusado, aquí se prometió revisar el caso con rigor.

…y ya estuvo.

La investigación de la FGR concluye que Cienfuegos rechina de limpio. Pero en Estados Unidos, no pesa el alto rango del militar mexicano. La justicia de allá manifiesta enojo; está atenta a reabrir el caso, lo cual traería problemas legales al gobierno mexicano por revelar información clasificada… y restringirla en el futuro.

Para canijo, canijo y medio.