Bienestar Michoacán, el negocio de la corrupción a costa del infelizaje
CHIAPAS., 29 de abril de 2018.- A 13 años de haber sido inaugurada por el entonces presidente de la República, Vicente Fox Quesada y el gobernador Pablo Salazar Mendiguchía, como una empresa que extendería su poderío por Centroamérica, en días recientes, Fritos Totis del Sureste,
que se ubicaba sobre el Libramiento Sur, cerró sus puertas.
Por ahora, los dueños de la fábrica, que el 12 de enero del 2005, cuando fue inaugurada,
se propuso exportar hacia países de Centroamérica y los Estados Unidos, solo ha dicho
que el cierre de la empresa que dio empleo a unos 200 jóvenes, “quebró”, según dieron a
conocer extrabajadores.
En enero del 2012, el entonces propietario de la empresa, Abraham González Torres,
declaró ante Fox Quesada que veía en Chiapas, el futuro “de una manera muy distinta”,
ya que la entidad empezaba a ser competitiva y a figurar en el mapa industrial.
Incluso, los “chiapanecos demandaban oportunidades” y empezaban a abrirse de “manera
significativa”, dijo el entonces dueño de Fritos Totis del Sureste, que tenía como su sede en el barrio Tultepec, en el municipio de Ecatepec, Estado de México y con una fábrica en Tizayuca, Hidalgo.
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