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QUERÉTARO, Qro., 01 de agosto de 2024.- Hoy, en los Juegos Olímpicos, se ha suscitado un debate en torno a la equidad en el deporte, especialmente en competiciones que involucran fuerza y resistencia. La boxeadora argelina Imane Khelif, quien tiene un perfil biológico de cromosomas XY, enfrentó a la italiana Angela Carini, de cromosomas XX, en un combate que terminó abruptamente en 46 segundos. La pelea finalizó cuando Carini, después de recibir un fuerte golpe, se retiró expresando su dolor.
Este evento ha reavivado la discusión sobre la participación de personas con diferencias en el desarrollo sexual (DSD) en categorías femeninas del deporte. Khelif, aunque se identifica y es reconocida como mujer, tiene características biológicas típicamente asociadas a los hombres, lo que plantea cuestiones sobre la equidad en competiciones deportivas.
Diferencias Biológicas Relevantes en el Deporte
El debate se centra en varias diferencias biológicas que pueden influir en el rendimiento deportivo:
1. Testosterona y Fuerza Muscular:
– Los hombres suelen tener niveles más altos de testosterona, lo que puede aumentar la masa muscular y la fuerza, proporcionando una ventaja en deportes que requieren potencia física.
2. Capacidad Cardiovascular y Respiratoria:
– Generalmente, los hombres tienen corazones más grandes y mayores volúmenes pulmonares, lo que puede mejorar la resistencia durante el ejercicio intenso.
3. Distribución de la Grasa Corporal:
– Las mujeres tienden a tener un mayor porcentaje de grasa corporal, lo que puede influir en su rendimiento en ciertos deportes, aunque también ofrece ventajas en actividades como la natación de larga distancia debido a la flotabilidad.
4. Densidad Ósea:
– Los hombres suelen tener una mayor densidad ósea, lo que reduce el riesgo de fracturas y puede mejorar el rendimiento en deportes de alto impacto.
5. Hormonas y Ciclo Menstrual:
– Las fluctuaciones hormonales pueden afectar el rendimiento de las mujeres, influyendo en factores como la energía y la coordinación.
La participación de Khelif en los Juegos Olímpicos no es su primer encuentro con la controversia. En marzo de 2023, fue descalificada del Campeonato Mundial de Boxeo Femenino de la IBA debido a niveles elevados de testosterona. Inicialmente, el Comité Olímpico Argelino citó razones médicas para su descalificación, pero más tarde se reveló que las pruebas mostraron que Khelif tenía cromosomas XY. Aunque apeló esta decisión, finalmente retiró su apelación, haciendo que la decisión de la IBA fuera definitiva.
Este caso pone en evidencia la necesidad de una discusión más profunda y regulaciones claras sobre la participación de atletas con DSD en el deporte, buscando un equilibrio entre la inclusión y la equidad en la competencia.