Indicador Político
● Casualmente todos los casos sospechosos de corrupción en el gobierno de López Obrador son investigaciones periodísticas y de ONG´s, ninguno fue descubierto antes por la SFP, la Fiscalía o la UIF.
La explicación del primo de Felipa Obrador Olán en Palacio Nacional es una elegía de lamentos sospechosos de una farsa que no cuajó. Esto es, moralmente la prima de Andrés Manuel López Obrador no podía obtener jugosos contratos de Pemex, y le armaron una mascarada para hacerla invisible, pero falló.
El problema es que alguien con acceso a estos contratos obtuvo la información y se los filtró a Carlos Loret de Mola, a sabiendas que la animadversión de Andrés Manuel con el periodista provocaría una reacción de gran impacto mediático.
En la conferencia de este lunes no le quedó más que insinuar que fueron engañados por Felipa, que sabía de su participación como contratista en la petrolera desde antes de nombrar a Octavio Romero Oropeza, que este le informó sobre el conflicto de intereses, y de inmediato prohibió su participación (video https://youtu.be/PKVthvmP4Zk).
Es cierto que Litoral Laboratorios Industriales fue fundada en Campeche en marzo de 2006 y ha sido contratista de la paraestatal desde hace siete años en el Gobierno de Enrique Peña Nieto, ya como director Emilio Lozoya Austin.
Pero la diferencia es abrumadora en los montos de los contratos con Pemex, comparando los cinco años del sexenio anterior, con montos acumulados de 40 millones, con apenas un año de este sexenio donde se le otorgaron 365 millones.
No hay credibilidad en la versión oficial porque la evidencia de corrupción en contratos de asignación directa en este sexenio es de récord, y los sobreprecios, digamos por ejemplo, de los ventiladores Covid que vendió el hijo de Manuel Bartlett Díaz, hablan de un discurso con una gran dosis de demagogia, contra la realidad en infinidad de dependencias, una de ellas el Seguro Social de Zoé Robledo Aburto que tantas compras ha generado.
Volviendo a Felipa Obrador, desde la llegada al poder de su primo, en diciembre de 2018, Litoral Laboratorios participó en cuatro concursos internacionales. En octubre de 2019 fue ganadora de un contrato, y ese mismo mes, presuntamente un funcionario de Pemex detectó el nombre de la empresaria en otra licitación y lo reportó directamente al director general.
Digo presuntamente porque de eso no se informó, y ahora habrá que creer la historia armada de último momento para moldear la realidad a la “Guía Ética para la Transformación” que tiene las máquinas a todo vapor imprimiendo 10 millones de ejemplares.
Congruencia hubiera sido que en octubre del año pasado el director Romero Oropeza y López Obrador salieran en la conferencia de Palacio a declarar: “Qué creen, cachamos a mi prima Felipa tratando de obtener contratos de Pemex de forma simulada, con otras empresas pantalla, pero en este momento los estamos invalidando”.
¿No fue así verdad..? gracias al reportaje de Loret de Mola en Latinus las tranzas salieron a flote, igual que las bolsas de efectivo entregadas a Pío López Obrador por David León, operador del ex gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, cercanísimo al presidente.
Si viviera Juan Ruiz de Alarcón volvería a editar “La verdad sospechosa” con el guion de las mañaneras.