Opinión|María Teresa Delgado Ortiz

Todos podemos ganar

Esta palabra es un reflejo de una mentalidad limitante, algunos la justifican con frases como: “el que no tranza no avanza”, pero no caracteriza en absoluto el comportamiento general de los mexicanos. Tan solo es una expresión de diversas carencias culturales; implica que mientras uno gana, los demás pierden. Y como nadie quiere perder, algunos buscan ganar a costa de lo que sea. Ese costo perjudica, a largo plazo, a todos, incluso al aprovechado, pero ¿realmente necesitamos perder y ganar para salir adelante en la vida?

No, lo que necesitamos es un cambio de enfoque porque sí es posible ganar colectivamente; ello requiere de un entrenamiento social y mental que inicia en la escuela, específicamente en los trabajos “en equipo”.

El aprendizaje colaborativo implica crecer juntos, desde nuestras distintas experiencias. Los profesores somos los encargados de supervisar que en este tipo de actividades exista: interdependencia positiva, comunicación e interacción constantes, responsabilidad individual, confianza mutua y celebración de logros. Solo así será posible transformar la mentalidad de nuestros jóvenes al observar que todos ganan, en la medida en que todos colaboran al generar un bien común.

Para transformar el típico trabajo en equipo en una verdadera cultura de colaboración y respeto mutuo, los profesores debemos reconocer las aportaciones valiosas de cada alumno en el aprendizaje grupal y ayudarlos a generar confianza a través de sus acciones. Más allá de dividir la tarea, los profesores tenemos que asegurar la conciencia en la práctica, al mostrar que cuando a un compañero le va bien, es porque al resto del equipo también le va bien y de esta manera todos contribuyen a un resultado más positivo, justo y compartido.

María Teresa Delgado Ortiz, Profesora de PrepaTec, Tecnológico de Monterrey Campus Querétaro.