Un vecino distante, desconfiado y colérico nos vigila
Es muy posible que Lisa –huracán que se ha degrado a tormenta—sea el último de la temporada de fuertes meteoros en nuestro Pacífico y Caribe. Con ello vendrá también el fin de las recargas de nuestros cuerpos de agua y un descanso para nuestras zonas costeras y montañas bajas del sureste del país. Un alivio ciertamente luego de sufrir los embates de Agatha en Oaxaca, que se recupera de a poco.
Aún degrada Lisa ha dejado cuantiosos daños en Belice, y ahora se dirige a Yucatán, Quintana Roo, Chiapas y Tabasco, donde se espera arroje torrenciales lluvias, entidades con amplias dotaciones de agua, capaces de dotar al resto del país, si hubiese los acueductos y obras hidráulicas necesarias.
Todo ello viene a cuento pues pese a las lluvias no pudimos captar toda el agua que demandamos.
Por ejemplo, de los 653 acuíferos que hay en el país, 157 estaban sobrexplotados hasta el año pasado -42 más de los reportados en 2019-, de acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Dichos mantos se encuentran sobre todo en el norte y sur de la península de Baja California, en Sonora, Chihuahua, Coahuila y Nuevo León.
A ellos se suma que hay 32 que presentan suelos salinos y agua salobre, mientras otros 18 están afectados por intrusión marina, ello con base en el estudio Perspectivas del agua en México, elaborado por la Red del Agua, Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Unesco y Agua Capital.
En dicho estudio se puntualiza que los acuíferos concentran 20 por ciento del agua renovable, se convierten en sobrexplotados o dejan de serlo en función de la relación extracción y recarga. El otro 80 por ciento del agua renovable se encuentra en las cuencas.
Los investigadores universitarios advierten que la importancia del agua subterránea se manifiesta en la magnitud del volumen usado por los principales usuarios. En México, 39 por ciento de las concesiones procede de esa fuente.
Y Agregan que la explotación excesiva de aguas subterráneas en los 157 acuíferos sobrexplotados equivale a poco más de 10 por ciento de la recarga natural media anual. También por la magnitud de los acuíferos, considera conveniente explorar alternativas de gestión para la recarga natural comprometida.
Plantean que se requiere reconocer el potencial de cada región con la finalidad de generar una mayor eficiencia en el uso del líquido en la agricultura y el potencial de intercambio de aguas subterráneas extraídas para dicha actividad por aguas residuales tratadas.
Sumado a eso, en el país el grado de presión sobre el agua, es decir el volumen que se extrae contra la que se renueva, es bajo. Hay regiones como el valle de México que tienen un grado de presión muy alto, estima el reporte.
El incremento desmedido en la extracción de agua en las cuencas y mantos por la demanda de los distintos usos, sumado a las deficiencias en la gestión del recurso, el debilitamiento de las instituciones, la falta de planeación, políticas e inversiones adecuadas, la ausencia de incentivos para la eficiencia y los efectos del cambio climático, han generado un aumento significativo del grado de presión y falta de accesibilidad y disponibilidad del recurso hídrico.
Concluyen en que esto genera condiciones potenciales para conflictos y disputas sociales por el acceso al agua para los distintos usos.
Por otra parte y a punto de concluir la temporada de huracanes 2022, las 210 presas más importantes de México registran un déficit de agua de 1.4 por ciento, con respecto a la media histórica, para colocarse en 89 millones 215 mil millones de metros cúbicos disponibles. En la última semana, los embalses acumularon 408 millones de metros cúbicos de agua, principalmente en la región sur (41%), noroeste (25%), oeste (23%), noreste (5%), centro (4%) y este (2%).
En cuanto al llenado de las presas, 38 se encuentran al 100%; 79 tiene entre 75 y 100%, 48 entre 50 y 75% y 45 están por debajo de 50%.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), el almacenamiento en los 210 embalses del país se ubica en un promedio de 71 por ciento.