Un vecino distante, desconfiado y colérico nos vigila
La pregunta clave que le dio el Canciller mexicano Marcelo Ebrard al periodista Joaquín López Dóriga fue la referente a que, una vez que le mostrara al presidente norteamericano Joe Biden, el armamento utilizado en el evento de Culiacán que concluyó con la captura de Ovidio Guzmán, El Ratón, fue ¿de dónde vienen esas armas?
La procedencia del armamento, que incluso en el evento de ayer en Culiacán fueron utilizadas contra un avión de la fuerza aérea mexicana y un avión comercial de Aero México, en su gran mayoría viene de Estados Unidos, cuyos comerciantes de armamento y cartuchos, siguen operando con una liberalidad que facilita a los miembros de las organizaciones criminales que existen en México adquirirlas con una facilidad que de verdad preocupa.
Ciertamente el tráfico de armas de Estados Unidos a México, que tuvo su la “genialidad” más peligrosa que se produjo en la operación Rápido y Furioso en tiempos de Felipe Calderón y Genaro García Luna, ha fortalecido el poderío de los carteles que operan en nuestro país.
Pero ello tiene un lamentable efecto boomerang ya que con ese armamento las organizaciones criminales se protegen para introducir al vecino país en Fentanilo, precursor que ha matado en sólo pocos años a más de 300 mil personas.
El problema del control de la venta de armas de Estados Unidos a México, y su regreso al poderoso vecino distante a través del Fentanilo, son sin duda una de las asignaturas que ambos países tienen como las más difíciles de resolver.
El fentanilo, un opioide sintético 50 veces más potente que la heroína, lleva muchos años considerado una auténtica epidemia en Estados Unidos, donde en 2021 fue la principal causa de que se alcanzara el récord de más de 107.000 muertes por sobredosis.
Hay dos tipos de fentanilo: el fentanilo farmacéutico y el fentanilo fabricado ilícitamente. Ambos se consideran opioides sintéticos. El fentanilo farmacéutico es recetado por los médicos para tratar el dolor intenso, especialmente después de una operación y en las etapas avanzadas del cáncer.
Fentanilo fabricado ilícitamente
El fentanilo fabricado ilícitamente (IMF, por sus siglas en inglés) se encuentra disponible en el mercado de drogas en diferentes formas, entre ellas como líquido y como polvo.
El fentanilo en polvo tiene la apariencia de muchas otras drogas. Con frecuencia se mezcla con drogas como heroína, cocaína y metanfetaminas, y se les da la forma de pastillas que se parecen a otros opioides recetados. Las drogas mezcladas con fentanilo son extremadamente peligrosas, y es posible que muchas personas no sepan que sus drogas lo contienen.
En su forma líquida, el fentanilo fabricado ilícitamente se puede encontrar como aerosol nasal, gotas para los ojos o aplicado en gotas en papel o en golosinas pequeñas.
Esa es la mortal droga que se introduce a Estados Unidos gracias al armamento que adquieren los carteles mexicanos en Unidos.