Opinión/José Luis Camacho Acevedo

El problema nodal de la Alianza Va Por México siempre fue la falta de liderazgo de quienes fungen como presidentes nacionales de esos partidos, a saber, el PRI, el PAN y el PRD.

Como político el más profesional de ellos es, sin duda, el perredista Jesús Zambrano. Lo malo es que Zambrano tiene la dirigencia de un partido prácticamente en extinción. Vacío y con una diáspora total de su militancia.

El muy explicable comportamiento de Alejandro Moreno Cárdenas de, primero, salvar su pellejo a costa de dejar a su partido totalmente debilitado para competir, ya sin Alianza, en las elecciones presidenciales del 2024, NO SORPRENDIÓ A NADIE.

La propuesta de la diputada priísta Yolanda de la Torre que lanzó, seguramente tutelada por el mencionado Alejandro Moreno, conocido en el bajo mundo de la política como Alito, una iniciativa que logró que las cámaras aprobaran la iniciativa de que el Ejército siguiera cumpliendo tareas de seguridad pública hasta el año 2028, algo que era muy del agrado del presidente López Obrador.

No conforme con deshacer virtualmente la Alianza Va por México, Alito ahora amenaza con denunciar y exhibir (¿) a sus compañeros que están atacando a la dirigencia que encabeza y a los acercamientos que tiene de manera descarada con MORENA, mismos que lo están salvando tanto del juicio político que tiene ya instruido, como la de una investigación por parte de la UIF acerca del origen de su fortuna.

Y todo esto ocurre, tal y como se vio en el Quinto Informe de Gobierno de Alfredo del Mazo, cuando los más distinguidos priístas saludaron con más entusiasmo a los morenistas Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López Hernández que al propio Alejandro Moreno, Va por México muere a pasos acelerados.

La falta de liderazgo en el PRI y en el PAN, fue el factor clave para que la estrategia de MORENA de romper Va por México funcionaria con una eficiencia digna de reconocimiento.

Marko Cortés está destruyendo lo que queda de Acción Nacional. Y Alito le hace al PRI lo mismo, y hasta más, de lo que hace al PAN el michoacano que comanda nominalmente a los azules.

Todo indica que el trabajo futuro de López Obrador, en materia de selección de su candidato presidencial para los comicios del 2024, será el cuidar que no se le divida su movimiento y logre postular con las más amplias posibilidades de convertirlo en ganador, al personaje que le garantice, no solamente su seguridad personal, sino incluso la continuidad de proyectos como sus obras pomposamente llamadas emblemáticas.

Conclusión: por lo pronto, ¡no hay tiro para el 2024 y MORENA va solo!

EN TIEMPO REAL.

1.- Sin el menor rubor político, y siguiendo el ejemplo de Alito de primero salvar su pellejo, el ya casi ex gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, será el nuevo embajador de México en Canadá. El nuevo diplomático había dejado correr el rumor de que sería el nuevo secretario de Turismo. Pero el pago por entregar Quintana Roo a Morena, nunca fue considerado de ese tamaño y la embajada en Canadá hasta se hace demasiado grande como compensación para Carlos Joaquín.

2.- Después de sufrir el terror de la balacera que se produjo en un enfrentamiento entre un grupo criminal y el Ejército en Orizaba, Veracruz, el gobernador de esa entidad, Cuitláhuac García, para variar, dijo lo de siempre y sin resultados inmediatos: que se investigaría hasta dar con los responsables, cuando éstos se entregaron después del zafarrancho a los soldados; los empavorecidos habitantes de esa ciudad, se tuvieron que recetar el comentario presidencial en la Mañanera de que eso era publicidad de los malosos que les encanta salir en las redes sociales. ¡Sopas!

3.- Las comisiones encargadas de dar trámite a la iniciativa priísta que prolonga la permanencia del Ejército en tareas de seguridad pública sacaron el encargo sin problemas. La nota fue que no solamente se aprobó con 40 votos de la comisión que encabeza el docto diputado potosino Juan Ramiro Robledo, para que el Ejército y la Marina prosigan sus tareas de vigilancia hasta el año 2028, sino que dieron un año más y ahora será hasta el 2029 cuando se revise el caso si fuera necesario. ¿Y su nieve de qué la quiere Alito?