Opinión/José Luis Camacho Acevedo

Ayer se inició lo que, según los especialistas, será el proceso que mantendrá vigente la prisión preventiva oficiosa.

Hoy se volverá a discutir el proyecto de sentencia del ministro de la SCJN, Luis María Aguilar, y lo más probable es que se vayan sumando votos a los cuatro votos emitidos ayer para lograr que se vuelva a reformular, por otro ministro de la Corte, la propuesta hasta dejarla, prácticamente, como está.

El presidente y sus consejeros argumentan que de eliminarse la medida cautelar podrían dejar la prisión casi cien mil presuntos delincuentes acusados de cometer delitos que ameritan penas de alto calado.

Los defensores de los derechos humanos aseguran que de mantenerse la medida, ocurrirá la experiencia tan negativa que nos lleva a considerar como válido el hecho de que te acuso, no te pruebo, pero por lo pronto te encarcelo.

Durante la presentación de su proyecto de sentencia sobre la constitucionalidad de la prisión preventiva oficiosa, el ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Luis María Aguilar, dejó en claro que no se propone desaparecer dicha medida cautelar, sino que esta sea dictada por el cuándo se encuentre debidamente justificada por la fiscalía.

El togado señaló que la prisión preventiva se mantendrá, pero de manera justificada.

Dijo explícitamente:

“No se propone que la prisión preventiva desaparezca, sino que solo se dicte por el juez siempre y cuando el Ministerio Público justifique las razones. La insistencia es: la prisión preventiva seguirá, pero de manera justificada”, señaló en el debate.

La verdad es que es la medida cautelar más severa que se puede aplicar a una persona acusada de un delito, no se le prueba de manera consistente el mismo, y por ello tiene que limitarse la tan debatida prisión preventiva oficiosa.

Desde el puntos de vista de muchas organizaciones sociales y foros de jurisconsultos, la prisión preventiva oficiosa se puede convertir en cualquier momento en un arma política tan eficaz como injusta.

Y como al presidente López Obrador cada mañera se le ocurre encontrar nuevos “adversarios neoliberales”, la contabilidad de los probables personajes no afines a las ideas del Presidente es bastante numerosa.

¿Con la prisión preventiva oficiosa López Obrador podría aplicar ajustes de cuentas políticas a sus adversarios?

Esa es la gran preocupación de muchos sectores de la sociedad que, en la medida en que se vayan calentando los tiempos político-electorales, los adversarios ideológicos o estructurales, pueden pasar de un momento a otro a ser objeto de persecuciones políticas.

Esa es una de las preocupaciones que causa el interés presidencial por mantener tan drástica medida cautelar.

Rosario Robles puede contar mucho al respecto.

EN TIEMPO REAL.

1.- Con la presencia de las corcholatas morenistas más destacadas, Adán Augusto López Hernández, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Ricardo Monreal, rindió protesta como gobernador de Hidalgo Julio Menchaca Salazar quien pronunció un encendido discurso reivindicatorio.

2.- Antes del evento en el que Julio Menchaca tomó protesta como gobernador de Hidalgo, fue muy comentado el cordial desayuno que sostuvieron el titular de gobernación, Adán Augusto López y el líder senatorial Ricardo Monreal.

3.- El próximo 9 de septiembre el gobernador saliente de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, a quien se le sigue mencionando con insistencia para ocupar una importante posición en la estructura del sector turismo del gobierno federal, ofrecerá a los medios de comunicación una comida de agradecimiento y despedida.