Libros de ayer y hoy
Teresa Gil
[email protected]
Las cifras parece que no calzan entre el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y expertos de salud, respecto a los fallecidos en México, pero una cosa es clara, “hay exceso de muertes” según ambas fuentes, aunque la información en los medios se diluye, porque se habla del año anterior, de meses diversos, se dan cifras que no se sabe si incluyen los últimos meses del año y los días del actual. El caso es que Inegi habla de más de 184 mil muertes en exceso y los expertos de más de 196 mil. Uno que fuera sería lamentable. Lo que no dicen ambas fuentes es que las enfermedades más persistentes que se mencionan en la mortandad, no son de las que se sufren en unos días. A excepción claro, del Covid-19 que puede llevarse a una persona en pocos días. Ahí es donde está la información oculta, porque de más de un millón de muertes que al parecer es una de las cifras anuales del 2020, el más alto porcentaje corresponde a enfermedades crónicas que se vienen arrastrando, no obstante que Inegi ya dice que el Covid-19 es la segunda causa de muerte. Tampoco se hace la aclaración de que muchos de los más de 153 mil muertos por el virus, son en algunos casos de personas muy debilitadas que normalmente entrarían en la trágica cifra anual si no existiera el Covid-19. O sea, el Covid-19 es la segunda causa de muerte pero incluye casos devastados cuya situación estaba signada por años de escasa atención, ya sea por mala alimentación, mala atención sanitaria y pobreza. Las fuentes que están informando hacen omisión de esos informes y terminan coincidiendo con los que culpan a la actual administración de esa tragedia.
EL EXCESO DE MUERTES EN EL PAÍS, SON POR MALES DE LARGA DURACIÓN
Tanto Inegi como los expertos mencionan enfermedades como las cardíacas, diabetes, problemas respiratorios y en otras ocasiones han mencionado tumores, obesidad que deriva en varias enfermedades y más. La causa está implícita en muchos casos en la falta de una atención oportuna y en la pobreza. No se necesita ser experto para saber que a lo largo de la gestación de esas enfermedades y su tiempo de desarrollo se llega al deterioro físico definitivo. Para escándalo de los críticos que ahora gritan que se deben suspender vacunas y acusan de las muertes al actual gobierno, las enfermedades que causan más muertes al país y que un porcentaje se suma al Covid-19 por el deterioro físico de los que se contagian, son de muchos años atrás. A las investigaciones sobre corrupción que ahora están aflorando con personajes diversos y cantidades impresionantes, les falta centrarse en el problema de la salud. Lo hemos mencionado aquí en otras ocasiones: el sistema de salud se ha señalado a veces, pero no se ha llegado al fondo del asunto. Los resultados actuales de tanta gente muerta y en peligro de estarlo, pueden entrar en la cuenta de saqueos, corruptelas y omisiones, por haber provocado un genocidio a gran escala. Crimen de lesa humanidad, incluso, porque incluye comunidades y sectores enteros que son los más afectados por el olvido y el deterioro que sufrieron y sufren.
PITÁGORAS, HAY OCASIONES EN LAS QUE TODO SE REDUCE A NÚMEROS
Comenzaba Pablo Neruda su Oda a los números:
¡Que sed de saber cuanto!
¡Que hambre de saber cuantas!
Estrellas tiene el cielo
Nos pasamos la infancia
contando piedras, plantas
dedos, arenas, dientes,
la juventud contando,
pétalos, cabelleras.
El número era todo para Pitágoras, el filósofo, matemático, geómetra, que nació en la isla de Samos y murió poco antes del año 500 después de haber henchido al mundo de una ciencia que lo arropa todo. ¿Que haríamos sin los números? Personaje extraordinario de la Grecia antigua lo invade todo con la matemática, pese a que decía que solo dios es sabio Y claro, se refería al dios del Olimpo en el que desde entonces creían los griegos. Ahora que nos preocupan los números de nuestra gran tragedia, es bueno recordar lo importante que eran para él los números naturales, el uno, el dos y el tres. Cosa que deberían de saber los que ahora cuentan nuestras desgracias y poner cada número en su lugar. De sus famosos versos de oro se han lanzado miles, millones de reproducciones a lo largo de los siglos, para versar un conocimiento que tiene mucha actualidad y al menos recordemos uno: aprende lo necesario, solo en la justa medida. Los poetas siempre tuvieron una gran admiración por Pitágoras, muchos de ellos escribieron tratados y poemas en su nombre y exaltaciones como las que hizo Aristóteles que por desgracia se perdieron. Mas cercano a nosotros, es este pedazo del poema Ama tu ritmo, del modernista Rubén Darío:
La celeste unidad que presupones
hará brotar en ti mundos diversos
y al resonar tus números dispersos
pitagoriza en tus constelaciones.
Escucha la retórica divina
del pájaro del aire y la nocturna
irradiación geométrica adivina.