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QUERÉTARO, Qro., 26 de noviembre de 2023.- En México, los hogares, lejos de ser refugios seguros, se convierten en escenarios críticos para las mujeres, en particular para las menores de edad, quienes enfrentan una alarmante prevalencia de agresiones en estos espacios. Esta realidad desgarradora resalta la urgencia de abordar la falta de educación y conciencia sobre las opciones disponibles para erradicar la violencia doméstica.
A pesar de los avances en distintos ámbitos, la violencia de género persiste en los hogares mexicanos, afectando desproporcionadamente a mujeres y niñas. Datos alarmantes revelan que la intimidad del hogar se ha convertido en el lugar donde ocurren la mayoría de las agresiones, lo que subraya la necesidad de una acción inmediata.
La falta de educación y conocimiento sobre los recursos disponibles para prevenir y abordar la violencia doméstica juega un papel crucial en este preocupante fenómeno. Muchas mujeres y menores no están al tanto de las organizaciones, líneas de ayuda y programas gubernamentales diseñados para apoyar a las víctimas y combatir la violencia en el ámbito doméstico.
Las instituciones educativas y las comunidades deben desempeñar un papel fundamental en la sensibilización y la educación sobre la violencia de género. Se requieren programas escolares que aborden no solo la igualdad de género, sino también la identificación temprana de signos de violencia y el acceso a recursos para quienes la experimentan.
Además, es crucial que las autoridades refuercen y promuevan los servicios de apoyo existentes, como líneas telefónicas de emergencia y refugios para mujeres maltratadas. La inversión en campañas de concientización a nivel nacional puede ser la clave para alcanzar a aquellas personas que aún desconocen las opciones disponibles.
Los legisladores también tienen un papel vital en este escenario. Es imperativo fortalecer y hacer cumplir las leyes destinadas a proteger a las mujeres y menores de edad. La impunidad en los casos de violencia doméstica debe abordarse de manera decidida, enviando un mensaje claro de que estos actos no serán tolerados en nuestra sociedad.