Reportan detención de El Mini Lic por cargos de fentanilo en EU
MÉXICO, 5 de agosto 2021. La aparición de las vacunas contra el coronavirus, creadas a una velocidad nunca vista en la historia, marcaron un antes y un después en la lucha contra la pandemia.
Pero las dificultades para producir las vacunas a una escala sin precedentes está causando dificultades en varias partes del mundo.
El primer gran escollo fueron los problemas con la producción y los temores sobre posibles riesgos de la vacuna de AstraZeneca y la Universidad de Oxford, que llevó a muchos países a tener que buscar alternativas.
Algunos optaron por las primeras vacunas estadounidenses que salieron al mercado: Pfizer-BioNTech y Moderna.
Pero cuestiones económicas (son las vacunas más caras) o geopolíticas llevaron a algunas naciones -entre ellas varias latinoamericanas- a apostar por una inoculación que aún no ha recibido el visto bueno de la Organización Mundial de la Salud: la Sputnik V.
La vacuna rusa fue la primera en ser registrada en el mundo, el 11 de agosto de 2020, pero la falta de datos sobre su composición generó escepticismo en un comienzo.
Sin embargo, cuando en febrero pasado la revista científica The Lancet publicó los resultados de la tercera fase de ensayos, que mostraban que la Sputnik V era una de las vacunas más eficaces del mundo -con un 92% de protección-, el interés creció.
con información de la BBC