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QUERÉTARO, Qro., 22 de julio de 2024.- Nuevas revelaciones sobre Thomas Matthew Crooks, el francotirador que intentó asesinar a Donald Trump, han emergido, destacando un sorprendente interés en la familia real británica. Crooks buscó información sobre Kate Middleton, la Princesa de Gales, y descargó fotos de ella en su teléfono, según las investigaciones.
Las autoridades están examinando minuciosamente las actividades de Crooks en los días previos al ataque para entender sus motivaciones. Antes del incidente, Crooks también realizó búsquedas en su teléfono sobre otras figuras prominentes como el presidente Joe Biden y el Fiscal General Merrick Garland.
De acuerdo con National Public Radio, el FBI está revisando los dispositivos electrónicos de Crooks, incluyendo una laptop y dos teléfonos móviles. Las búsquedas en sus dispositivos revelaron nombres como Kate Middleton, el presidente Biden, Donald Trump, el Fiscal General Merrick Garland y el Director del FBI, Christopher Wray. Además, Crooks había descargado fotos de estas personalidades en sus dispositivos.
Crooks, de 20 años, fue neutralizado el 13 de julio después de desatar un tiroteo en un mitin en Butler, Pensilvania, donde Trump estaba dando un discurso. Durante el ataque, Crooks disparó ocho balas, una de las cuales rozó la oreja de Trump, causándole una herida leve. El ataque resultó en la muerte de un espectador y en heridas graves para dos personas más. Crooks fue abatido por un francotirador del Servicio Secreto.
El tiroteo dejó un saldo de un muerto y tres heridos. Crooks, quien era un republicano registrado, también había investigado fechas clave como la Convención Nacional Republicana y la Convención Nacional Demócrata. Según Associated Press, Crooks compró 50 balas para el rifle tipo AR utilizado en el ataque el mismo día del tiroteo. El arma, adquirida legalmente en 2013, estaba registrada a nombre de su padre.
Tras sobrevivir el intento de asesinato, Trump apareció en un evento al día siguiente. Aunque la bala rozó su oreja, causando una herida leve, Trump se presentó frente a sus seguidores con una venda en la oreja. Muchos de sus seguidores también llevaron vendas en la oreja como un gesto de apoyo hacia el expresidente. La multitud aplaudió mientras Trump, con la oreja vendada, agradeció el respaldo recibido durante su discurso.