
Shakira suma nueva fecha en Querétaro tras agotar boletos
QUERÉTARO, Qro., 27 de marzo de 2025.- Han pasado casi tres años desde la sonada separación de Shakira y Gerard Piqué, pero la tensión entre ellos sigue vigente, especialmente cuando se trata de asuntos relacionados con su patrimonio. A pesar del éxito que vive actualmente la cantante colombiana con su gira en México, en el ámbito personal, la situación sigue siendo complicada, especialmente en lo que respecta a la venta de la mansión que compartieron en Barcelona.
Según el periodista Jordi Martín, quien ha seguido de cerca la relación de la expareja, el proceso de venta de la lujosa residencia en el exclusivo barrio de Esplugas de Llobregat continúa estancado. La propiedad, adquirida por la expareja en 2012, sigue a la venta desde su separación, pero las diferencias económicas entre Shakira y Piqué han impedido que lleguen a un acuerdo.
En un video publicado en su cuenta de Instagram, Jordi Martín explicó la difícil situación por la que atraviesa la expareja. «Piqué y Shakira están de nuevo en guerra. Esta casa fue el hogar donde nacieron Milan y Sasha, y es evidente que sigue siendo un lugar de grandes recuerdos, tanto buenos como malos. Para Shakira, este lugar debe ser emocionalmente doloroso», comentó el paparazzi, quien agregó que la venta de la mansión ha provocado fuertes discusiones entre ellos.
La casa, que está valorada en unos 12 millones de euros, ha sido el centro de un intenso tira y afloja entre los excompañeros. Mientras Piqué parece estar presionado por vender rápidamente para poder construir una nueva casa junto a su actual pareja, Clara Chía, Shakira se mantiene firme en sus exigencias, sin querer rebajar el precio de la propiedad.
Martín también explicó que Shakira no estaría dispuesta a hacer concesiones en cuanto al precio. «Shakira no quiere regalar ni un euro. Piqué está apurado porque quiere la venta lo más pronto posible, pero las negociaciones están complicadas», agregó el periodista.
Según el paparazzi, la propiedad podría tener un valor de entre 6 y 10 millones de euros, una cifra considerablemente más baja que la pretendida por Shakira, lo que podría estar detrás de la falta de acuerdo. Finalmente, Jordi Martín señaló que una vez que logren venderla, el dinero se dividirá en partes iguales, como se acordó inicialmente entre ambos.
Mientras la expareja continúa discutiendo por esta propiedad, sus diferencias siguen siendo un tema recurrente en los medios. A pesar de su éxito individual, la resolución de este conflicto parece estar lejos de llegar.