Libros de ayer y hoy
El turismo, es frecuentemente ensalzado como una fuente vital de ingresos y progreso para los países en desarrollo; sin embargo, tiene dimensiones que requieren de un escrutinio cuidadoso. Mientras países como México se esfuerzan por maximizar los beneficios del turismo ahora sin recursos gubernamentales y sólo con el esfuerzo de la iniciativa privada, las reflexiones de dos autores económicos, Joseph Stiglitz y Paul Krugman, ofrecen un marco revelador para entender los desafíos y oportunidades.
Joseph Stiglitz, en su obra «La globalización y sus descontentos», advierte sobre los peligros de una liberalización apresurada: «Los países en desarrollo tienen recursos humanos y naturales que, en una globalización bien gestionada, deberían ser sus activos» (Stiglitz, p.57). México, a pesar del desaire que tiene y su falta de política económica, cuenta con su rica diversidad cultural y paisajes deslumbrantes, que la ubican en una posición única para capitalizar su patrimonio. Sin embargo, la gestión del turismo debe ser meticulosa para proteger estos «activos» y estar en manos de personas expertas en el tema.
Krugman, en «Contra los zombis: Economía, política y la lucha por un futuro mejor», enfatiza los riesgos inherentes a las burbujas económicas. Si bien habla sobre crisis financieras, su argumento resuena en el ámbito turístico: «La historia de la economía global de las últimas tres décadas es, fundamentalmente, la historia de una serie de burbujas» (Krugman, p.67). Los destinos turísticos, como Cancún o Tulum, enfrentan desafíos similares, con picos de inversión y afluencia turística que podrían desestabilizar las economías locales si no se gestionan de forma adecuada.
México también tiene la tarea de equilibrar los ingresos del turismo con la protección de sus comunidades indígenas y su medio ambiente. Como Stiglitz señala en «El malestar en la globalización»: «La rápida liberalización puede traer más costos que beneficios» (Stiglitz, p.103). La Riviera Maya, por ejemplo, ha experimentado un rápido desarrollo turístico que plantea cuestiones sobre el impacto en sus ecosistemas frágiles y las comunidades que tradicionalmente han habitado la región.
Sin embargo, no todo es sombrío. México, con su rica historia y cultura, tiene la capacidad de ofrecer un turismo más sostenible y experiencial. Krugman y Stiglitz subrayan la necesidad de políticas informadas y una gestión cuidadosa para garantizar que los beneficios de la globalización se realicen de manera equitativa.
México, como muchos países en desarrollo, tiene ante sí un desafío y una oportunidad. La relevancia de poder interpretar laas reflexiones de Stiglitz y Krugman en materia turística, nos recuerdan la importancia de abordar el turismo con una visión a corto y largo plazo, entendiento la economía transversal y las oportunidades de crecimieno que genera, sin dejar de lado la necesaria protección de los recursos, y garantizando que las ganancias beneficien a todos los ciudadanos.
Los recursos para la economía de un país debe estar basada en la integración de todas las industrias y sectores para con ello llevar a cabo acciónes que impulsen al crecimiento y reduzcan la pobreza, el turismo es parte de ello; y aunque en 5 años el Gobierno de México no lo ha entendido, es tarea de los nuevos relevos para que desde hoy trabajen en el tema y en 2024 regresen el valor a la industria turística que para nuestro país tiene.