Indicador Político
Bastantes comentarios, algunos en serio y los más en
tono de broma, se han producido por la filtración que
dio acerca del madruguete que pretende dar el
inefable Alejandro Moreno, conocido en el bajo
mundo de la política como ALITO, para que en la
próxima asamblea nacional del partido fundado por
Plutarco Elías Calles, sea reelegido por ¡otros cuatro
años¡ como presidente de esa organización.
Después de la vergonzosa derrota que sufrió el PRI en
las pasadas elecciones, derrota que lo mandó al
cuarto lugar del espectro partidista mexicano, por
debajo de Morena, el PAN y Movimiento Ciudadano,
Alito ni se inmuta y todo parece indicar que la paliza
que se llevó no lo hizo pensar, para nada, en
renunciar.
Ahora el antes invencible Tricolor se tendrá que
pelear el dudoso honor de ser el mayor de los coleros
en las cifras electorales que arrojaron los resultados
de los comicios del 2 de junio.
Alejandro Moreno fue alentado al gobierno de
Campeche en el sexenio de Enrique Peña Nieto. Fue
un mandatario sin liderazgo político que se dedicó a
hacer grilla en la capital del país dejando que
oposiciones como el PAN y un creciente MC, ganaran
los más importantes municipios del estado.
Alito dejó una de las mayores deudas públicas en el
estado de Campeche y entregó la plaza a la
controvertida morenista Layda Sansores.
Junto con Rubén Moreira y Carolina Viggiano, han
convertido al PRI en un negocio particular.
El próximo año estarán en juego nuevamente muchos
cargos relevantes de elección popular. Y
seguramente, si los priístas dejan que Alito saque
adelante su madruguete, las candidaturas estarán
nuevamente a la venta y el ex invencible PRI volverá a
perder posiciones.
Morena no es el nuevo PRI. Pinta para ser un partido
longevo, pero con diferencias notables a lo que fue el
tricolor desde sus inicios. Y peor, a lo que es ese
partido ahora.
El PRI de los tiempos presentes es un remedo de
partido.
Sus militantes genuinos, los que en los años ochenta
profesaron el nacionalismo revolucionario, son los
únicos que pueden salvar al partido de la
desaparición lastimosa a la que lo lleva la pandilla de
Alito.
Pero todo parece indicar que el PRI es la crónica de
una muerte anunciada, como dijera el clásico.
EN TIEMPO REAL.
1.- La gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama,
sigue sin darse cuenta del robo en despoblado que su
coordinadora de comunicación social, Bridgget Ortega
está cometiendo en los municipios a través del
pasquín llamado El Momento. Grave asunto en una
entidad urgida de recursos para atender a los
habitantes afectados por las lluvias.
2.- Muy bien organizadas las fiestas de San Juan y la
Presa de la Olla por el alcalde capitalino Alejandro
Navarro. Incluso en el municipio que padecía una
grave sequía, se dejaron caer fuertes aguaceros los
últimos días.
3.- En San Luis Potosí sigue con su intensa promoción
de gestoría el diputado plurinominal electo Salomón
Rosas. Hace falta en esa entidad mayor
gobernabilidad y una seguridad pública que promueva
la inversión económica.