Impulsa UT San Juan conciencia contra la violencia hacia las mujeres
QUERÉTARO, Qro., 13 de enero de 2024.- Alistan la inauguración la exposición de El lobo feroz me quiso comer, con la que se hace un ejercicio de recuperación de la memoria colectiva en torno a los movimientos políticos y de guerrilla de los años 70 en México.
La artista multidisciplinaria, Selma Guisande, explora la relación del cuerpo con el contexto geográfico, político y social, muestra que representa también una forma de visibilizar cómo las políticas de Estado atraviesan los cuerpos y el imaginario de las personas.
Además, recuerda que el año 1976 la marcó cuando frente al edificio donde vivía fue asesinado un amigo de su padre que, sin saberlo su familia, era un exguerrillero de las Fuerzas de Liberación Nacional, que más adelante sería el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
Por lo anterior, su familia sufrió una persecución de Estado durante varios meses que casi les orilló al exilio y por lo cual sus padres decidieron cambiarle el apellido. Luego de ese episodio Selma tuvo pesadillas obsesivas, en alguna de las cuales aparecía un lobo feroz vestido de policía que se la quería comer.
La artista agregó que, a propósito de los 30 años del levantamiento EZLN, la exposición de alguna manera teje sus raíces en su historia, para recordar la importancia de visibilizar las violencias y resaltar que, al mismo tiempo, es necesario soñar y procurar otros mundos posibles.
La exposición tiene entrada es libre y se podrá visitar de 10 a 18 horas, de martes a domingo, en el MACQ, que se ubica en Manuel Acuña, esquina con Reforma Oriente, en el Barrio de La Cruz de la capital queretana.