Reportan detención de El Mini Lic por cargos de fentanilo en EU
PRETORIA, Sudáfrica, 4 de marzo de 2015.- ‘El Rey se la Selva’, magistral mamífero carnívoro de 250 kilos, intimidantes 2 metros de longitud, facultado para correr a 59 kilómetros por hora, capaz de derribar con sus poderosas garras a presas hasta 3 veces más grandes y considerado el felino viviente más peligroso sobre la faz de la tierra, el león representa un verdadero portento en ingeniería para matar que, este miércoles, se anotó una nueva conquista: aprendió a abrir puertas.
“Somos la siguiente víctima del depredador de la sabana”, precisa The Mirror, ello al exhibir una grabación del joven estadounidense Joshua Sutherland, quien durante un viaje de placer a Sudáfrica, a principios de 2014 y en compañía de sus familiares, decidió participar en un safari que casi se convierte en tragedia.
El incidente, que involucra a Sutherland y sus hermanas, se habría suscitado en algún punto no referido del país marfileño durante el pasado mes de marzo, no obstante, se comenzó a viralizar hasta el día de hoy al poner en evidencia que los poderes de la naturaleza no son cosa de juego al momento en que el hombre coquetea con el peligro.
“Habíamos ido para visitar a nuestros padres, quienes se encuentran en una misión humanitaria, sin embargo, de camino nos enfrentamos a la mayor experiencia de nuestra vidas… ¿Sabían que los leones pueden abrir puertas?”, publica el joven en la versión original del video que cuenta con 133 mil visualizaciones.
Las imágenes registran como, desde un vehículo, el muchacho graba una manada de leones que reposan bajo la sombra, momento preciso en que una hembra es abatida por la curiosidad y lánguidamente se acerca hasta el automóvil. Sutherland y la minina establecen un contacto visual único y es entonces que la depredadora muerde la cerradura y accidentalmente abre la puerta, desatando el terror entre los pasajeros.
Descuide, Sutherland y toda su familia sobrevivieron al encuentro, según consta en The Mirror, ya que los alaridos humanos parecieron consternar tanto a la leona que, sin inmutarse del todo, abandonó la escena a paso ligero (eso sí, el joven estadounidense no sube más videos desde hace 11 meses).
Si no le pareció suficiente la dosis de adrenalina con un león, le proponemos algo “más grande” para su deleite.
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