Razones
Quisiera gritarle al mundo que aquí estoy. ¿A cuántos no les ha pasado esto?
Hace unos días mi hijo me preguntaba: ¿mamá, porqué los dirigentes o el Papa, son personas mayores? A lo que respondí, porque a cierta edad adquieres sabiduría, sabes más de la vida y estás con los pies en la tierra.
Lo cierto es que la edad no sólo te da arrugas y gorditos, la realidad es que la edad trae consigo un despertar, un vivir con alegría dando gracias día a día por contar con experiencias nuevas y también oportunidades. Cada persona que conoces, cada paso que das trae consigo la elección de tomar un camino u otro. Tenemos la elección de ver nuestra vida como la aventura más grande sin embargo nos empeñamos en ver siempre lo que nos falta, lo que no hemos alcanzado cuando la abundancia te llega todos los días a todas horas.
El sistema social creado hace muchos, muchos años, funcionó hasta éstos tiempos, sin embargo hoy se encuentra en crisis, en cambio, y la gente lo percibe si no todos, ya hay voces que demuestran que se puede pensar diferente y hacer las cosas de manera distinta.
Hoy una persona de 40 años no se considera viejo, quizá los adolescentes lo ven distinto, pero quien los tiene puestos reconoce una gran vitalidad hasta para resurgir con toda la fuerza para nuevos proyectos.
La gente pide a gritos que se le voltee a ver cuando lo primero es saber reconocerse con esa grandeza que cada ser humano cuenta y que no nos atrevemos a observar. Entender la maquinaria del pensamiento no es cosa fácil y yo aún no comprendo porque nuestra mente es nuestra principal soboteadora cuando podemos revertir lo negativo en positivo con tan solo decidirnos a pensar de manera opuesta.
No son procesos, son acciones. No es necesario estar plantado en los pensamientos de sufrimiento para castigarnos por alguna situación vivida. Aprendamos a observar y a disfrutar que en cada vivir, hay un aprendizaje que nos abre el camino a nuevas oportunidades.
Así que deja de gritarle al mundo que aquí estás cuando el primero que tiene que validarse eres tú mismo.
Aprendamos a reconocer lo bueno en nosotros.
Por Patricia Olavarrieta | @polavarrieta | www.visiondemujer.mx