PRI abandonó a la gente; cambiar nombre y color no es solución: Madrazo
TOLUCA, Edomex., 19 de febrero de 2014.- Hacer público el padrón de trabajadores mexicanos que de 1942 a 1964 se desempeñaron de forma legal en los campos de cultivo de los Estados Unidos, así como los documentos donde consten los montos que se entregaron al gobierno mexicano por concepto de ahorro-retención (10 por ciento del salario), es parte del contenido de la carta-petición que esta tarde intentará entregar Efraín Arteaga Domínguez, titular de la Coordinadora Nacional de Ex Braceros, al presidente de los Estados Unidos Barack Obama.
“Ya hicimos algún planteamiento en este sentido, en el mismo territorio de los Estados Unidos, hoy que está en nuestra casa -México-, en Toluca le estaremos entregando una carta, para ratificar nuestra petición que consiste en la entrega del padrón de los ex braceros, listas de trabajadores que están en los archivos oficiales estadounidenses”, precisó el dirigente que la tarde de ayer llegó a la capital del Estado de México con la intención de entregar el documento en las manos de Obama.
Arteaga Domínguez puntualizó que la Coordinadora Nacional de Ex Braceros, también está requiriendo a las instituciones estadounidenses, todos los papeles de los depósitos, transferencias o entrega de dinero que en su momento se retuvo (10 por ciento de su salario) a los más de cuatro millones de trabajadores que se desempeñaron por más de 20 años en las campos de cultivo de Estados Unidos, pues sus ciudadanos estaban ocupados en la segunda guerra mundial y la producción de alimentos corría por cuenta de un «ejército» de trabajadores mexicanos, precisó.
En este sentido, Efraín Arteaga recordó que hay suficiente evidencia que permite conocer que en aquellas décadas, el gobierno estadounidense, a través de diversas instituciones, sí cumplió con el acuerdo y envió el ahorro que sumó millones de dólares a sus pares de México, específicamente a cuentas de Banrural, pero los funcionarios mexicanos nunca entregaron el dinero a los trabajadores, situación que calificó como el robo más grande en la historia de México pues el monto asciende a billones de pesos.
Detalló que la retención de una parte del salario de los trabajadores o ex braceros que se desempeñaron en ese periodo de forma legal, se registró a partir de un acuerdo entre ambos gobiernos, el cual se pactó precisamente para que los trabajadores no se quisieran quedar a vivir en Estados Unidos y regresaran a México donde se les entregaría su ahorro, situación que nunca ocurrió, pues aunque prácticamente la gran mayoría regresó, nunca vieron su dinero-ahorro.
Explicó que si la Coordinadora logra tener acceso a las listas (base de datos) de ex braceros y documentos que tiene el gobierno de Estados Unidos donde se demuestra la entrega de los recursos, el gobierno de Enrique Peña Nieto, ya no tendría pretexto alguno para pagar los millones de pesos que pertenecen a los ex braceros o a sus familias en caso de que los trabajadores hayan fallecido.
En este sentido, precisó que durante la administración de los ex presidentes Vicente Fox y Felipe Calderón, se registró un avance mínimo pues junto con el Congreso de la Unión, se avalaron partidas presupuestales para pagar alrededor de 38 mil pesos a cada ex brasero que comprobaron su estancia en territorio estadounidense, durante esas décadas, pero con la administración de Peña Nieto todo se vino a pique porque la partida presupuestal desapareció y en 2014 los trabajadores que hoy son de la tercera edad, no tienen ni siquiera esa pequeña expectativa.