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La joven fue revictimizada por la Agencia de Ministerio Público y a pesar de que su padre entregó las pruebas, no hay avances en la indagatoria ni se ha detenido al agresor.
QUERÉTARO, Qro., 17 de junio de 2015.- El pasado 10 de febrero una joven perdió la vida bajo el puente de Constituyentes, a la altura de Aurrera.
Se había aventado ante la mirada de algunas personas que estaban en el lugar y que no pudieron evitarlo.
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Su padre, cuatro meses después, rompió el silencio y denunció en una entrevista que reproduce la periodista Claudia Ivonne que todo fue por negligencia de la Agencia 4 del Ministerio Público local, donde días antes había acudido a presentar querella por una violación de la que fue objeto.
Tenía un año de haber llegado a vivir a Querétaro con su familia.
En el reportaje, refiere que la Laura «N» llegó el 4 de febrero a la agencia especializada en delitos cometidos contra la familia, violencia intrafamiliar y violencia sexual de Querétaro, pues había sido violada.
La joven vendía helados en el Centro Histórico de Querétaro y ese día había sido interceptada por un hombre que vendía perfumes en esa misma zona, y como se le hizo familiar por el trato seguido que tenían, le ofreció darle un ‘ride’.
El padre de la joven refiere a la periodista que ya en el automóvil el hombre le dijo que irían a tomarse unas copas con unos amigos, a lo que ella se negó.
Para entonces, el hombre le dijo que irían por un refresco, algo que no ocurrió, por el contrario, enfiló rumbo al viejo aeropuerto de Querétaro y abusó sexualmente de Laura «N».
Luego de que la habría ultrajado, todavía le prestó el celular y Laura envió un mensaje a su padre, quien la fue a recoger a la parada del camión. Incluso, el hombre se presentó como el novio de la joven.
Tras irse, Laura narró a su padre lo ocurrido y fueron a solicitar ayuda en la zona.
Vieron a policías y éstos les recomendaron mejor «darle la pastilla del día siguiente» y que olvidara la denuncia, pues a quienes lo hacían sólo los «traen vueltas y vueltas hasta que se cansan».
A pesar de las recomendaciones que realizaron los oficiales, decidieron ir a la Agencia del Ministerio Público donde estuvieron varias horas hasta que fue atendida por la MP Mónica Galicia Beltrán, quien levantó la Averiguación Previa IV/377/2015.
Luego de ello, la enviaron al Hospital del Niño y la Mujer donde le aplicaron vacunas y le dieron la pastilla del día después.
Posteriormente, narra a la periodista el padre de Laura «N», le dieron una cita para el psicólogo para el 7 de febrero, pero al llegar al lugar le dijeron que no estaba en la agenda y que como no estaba «apuntada» le darían una para el día 17 de ese mismo mes.
Inmersa en una profunda depresión Laura «N» salió el 10 de febrero de su domicilio, al cual no regresó.
Para el 11 de febrero la comenzaron a buscar en los hospitales pero de manera infructuosa, en un momento dado, le invitaron a subir a una patrulla dos oficiales que le dijeron que la habían encontrado.
En el trayecto a la Agencia 1 del Ministerio Público, le preguntaron sobre su hija y la vida de ésta. Ahí le informaron el fatal desenlace de Laura.
A cuatro meses del delito que le costó la vida a la joven no se ha informado sobre algún avance en el expediente abierto por el delito de violación ni de la detención del presunto responsable.
Cada semana, su padre, que se siente responsable por haberla traído a vivir a Querétaro, acude a la agencia del MP donde le dicen que no hay avances, a pesar de que entregó el celular del agresor y el número de placas del vehículo donde la ultrajaron.
«No hay justicia», dice su padre de nombre Martín.
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