Patricia López/Quadratín Querétaro | Fotos: Jesús López/Quadratín Querétaro
Alejandro Solalinde estimó que empiezan a revelarse cosas que el Estado pretendió ocultar para entorpecer la justicia en caso Ayotzinapa.
QUERÉTARO, Qro., 10 de septiembre de 2015.- El sacerdote católico y activista Alejandro Solalinde consideró que Ayotzinapa ensució la cara a México y nunca se va a quitar esa tinta indeleble, aunque el gobierno quiera dar una cara mundial diferente con la recepción de migrantes sirios.
En su visita a Querétaro, consideró que México pretende aprovechar el caso de los refugiados como parte de un oportunismo político, para cambiarse el rostro en el mundo, pero no dejará de ser “candil de la calle y oscuridad de su casa” porque no tiene piedad de los centroamericanos y aún debe dar respuesta por Ayotzinapa.
“Porque Ayotzinapa es una radiografía de lo que es el Estado; siguen moviendo, siguen hurgando, siguen viendo más cosas terribles de complicidad con el narco, con el narcoestado, porque no les importa la justicia, les importa la imagen. Ayotzinapa fue una fotografía infraganti de un crimen de Estado.”
Sin embargo, consideró que gracias a la presión internacional y nacional, cada vez estamos más cerca de obtener respuestas en el caso Ayotzinapa porque son más las voces que se suman a la exigencia y obligan a dar con los normalistas desaparecidos.
Al respaldar el informe de organismos internacionales, Alejandro Solalinde estimó que empiezan a revelarse cosas que el Estado pretendió ocultar para entorpecer la justicia en este caso.