Querétaro se mantiene en los primeros lugares de combate a la corrupción
SAN JUAN DEL RÍO, Qro., 31 de octubre de 2014.- En medio de gritos y lamentos, queretanos festejan día de muertos mediante un performance que recorre algunas calles del centro de la Ciudad para llegar al Museo de la Muerte, único de su tipo en el país, ya que se encuentra en un antiguo panteón, donde se encuentran enterrados no sólo las personas ilustres sino indígenas que no tenían derecho a la “sepultura”.
Con este performance los habitantes de la localidad se burlan de la muerte en medio de las lápidas con los restos a perpetuidad que datan del siglo XVII, y que en la parte trasera del mismo, se ubica una casa donde habitaron un tiempo las llamadas “poquianchis”, cuando huían de la justicia, y que narran los habitantes, solían esconder a las chicas que se robaban de los pueblos para llevarlas a Guanajuato y prostituirlas.
La Catrina, canta en estos días de muertos a “los despistados que vienen por ahí”. Mujeres ataviadas de negro y acompañadas con una caja de muerto penan por las calles.
El Museo de la Muerte fue fundado en 1997, y se ubica en el Panteón de la Santa y Verdadera Cruz, con la intención de mostrar a la muerte como fenómeno cultural con todo y misterios con contenidos simbólicos, como la iconografía donde representa el miedo al infierno y purgatorio.
En la calle más antiguas en el barrio de Santa Cecilia, de la ciudad de San Juan del Río, donde se menciona existen diversas manifestaciones sobrenaturales provenientes del antiguo panteón, donde todavía hasta hace un año se celebró con un concurso de plañideras.