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Habitantes de las zonas aledañas sufren las consecuencias del mal manejo
EDOMEX, 19 de abril 2016.- El mal manejo y saneamiento del exrelleno sanitario Bordo Poniente, además del problema ambiental que representa, tiene efectos nocivos serios en la salud de la población que vive en colonias aledañas, así como incomodidades para toda la ciudad, principalmente por el mal olor que se expide y dispersa durante la tarde y noche casi todos los días, advirtió Pablo Solís, especialista en Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, detalla Excélsior.
Dijo que los más comunes e identificados por la población afectada son dolor de cabeza, de estómago y el desarrollo de alergias, debido al fuerte olor que produce la planta de composta, la presencia de fauna nociva que contamina alimentos y las partículas en el aire que dañan piel y vías respiratorias.
“Vivir cerca de un relleno sanitario no es recomendable, pero para muchos es inevitable. Aunque por norma las zonas habitacionales deben estar al menos a 400 metros a la redonda, en Bordo Poniente la primer colonia está a 100 metros, por lo que los impactos nocivos son directos”, indicó.
Un ensayo realizado por investigadores del Centro Molina para Estudios Estratégicos sobre Energía y Medio Ambiente indica que quienes viven en zonas aledañas al bordo durante todo el año perciben olores desagradables y fauna nociva, y las relacionan con enfermedades y malestares como la cefalea, vómito, hipertensión, dolor abdominal y miocarditis.
Señalan que elementos provenientes del relleno sanitario como el benceno, tolueno, cloruro de vinilo, dicloroetano y cloroformo, entre otros, son clasificados como cancerígenos.
El especialista de la UNAM reconoció que no hay una estadística específica sobre los efectos de la contaminación que emite el relleno sanitario, y los centros de atención médica tanto del Estado de México como de la Ciudad de México.
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