Conmemoran día mundial de esclerosis

QUERÉTARO, Qro., 28 de mayo de 2014.- Falta de movilidad, dificultad para comunicarse y sobre todo, complicaciones para conseguir empleo, son algunas de las condiciones que enfrentan las alrededor de cien personas con esclerosis múltiple en el estado.

Con motivo del día mundial de la esclerosis múltiple que conmemoraron la Comisión legislativa de Igualdad de Género, Grupos Vulnerables y Discriminados, así como la Comisión de Salud y Población, algunas personas dieron testimonio de las dificultades de la enfermedad.

Selena Margarita Flores Castañón, de 30 años de edad, padece desde los 18 años de esclerosis múltiple, cuando “se le durmió medio cuerpo” y tardó un año en recuperarse de un tumor en la hipófisis.

“Me enfermé del lado izquierdo y luego me recuperé, lento, lento, al último los dos, derecho e izquierdo. Ya no trabajo, era cajera. Ya no, tiembla mi mano, hace tun tun tun”, sonríe.

Aunque cuenta con Seguro Social, no tiene más apoyos para tratar su enfermedad. De acuerdo con Gerardo Isais, de la organización Sinmielina, este tratamiento supera los 40 mil pesos mensuales.

“Hay muchas personas que no tienen acceso al Seguro Social y nuestro tratamiento es demasiado caro, arriba de 40 mil pesos. Estamos tratando de ayudar a la gente que no tiene los recursos necesarios.

Solamente el Seguro Social tiene un registro de cien personas con esta enfermedad, pero de acuerdo con el diputado Enrique Correa, presidente de la Comisión de Salud y Población, al menos el uno por ciento de la población la padece.

“Es una enfermedad que transforma la vida y el entorno social de toda una familia y una comunidad en torno a esta enfermedad poco conocida en la ciencia, no se saben sus causas no se sabe la forma de curarla y esto es lo que trabajamos”, señaló el diputado.

La esclerosis múltiple afecta el sistema nervioso central y conlleva problemas visuales, de coordinación, pérdida de la tonificación muscular y pérdida de movilidad, así como problemas serios en el sistema digestivo.

Aunque la enfermedad ataca principalmente a las mujeres entre los 20 y 40 años de edad, pueden detectarse casos en edades posteriores y en hombres.