Emite Ssa aviso preventivo ante casos importados de sarampión
El instituto en Querétaro informó que aumenta un 20 por ciento el riesgo de padecerlo cuando no desciende alguno de los testículos en el paciente.
QUERÉTARO, Qro., 14 de abril de 2015.- En todos los aspectos, el cáncer significa malignidad, sin embargo, cuando afecta con más frecuencia a la población joven se vuelve un problema grave, como el caso del cáncer de testículos diagnosticado a hombres entre los 15 y 35 años de edad, por lo que se vuelve prioritaria la detección temprana mediante la cultura de exploración, difunde el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Querétaro.
El doctor Alberto González Gómez, urólogo adscrito al Hospital General Regional (HGR) No. 1 del IMSS en el estado, señaló que esta enfermedad se puede identificar mediante la exploración una vez al mes durante el baño, ya que la relajación de los músculos permite detectar de manera oportuna cualquier malformación o tejido duro en el testículo.
“Habitualmente no hay dolor, pero no es la regla, hasta el 10 por ciento de los pacientes pueden presentar alguna molestia, sobretodo cuando es una masa de gran tamaño, ya que puede estar desplazando las estructuras o desarrollando una infección, pero el 90 por ciento de los casos son asintomáticos”, indicó el doctor Alberto González.
Las principales causas para que un hombre desarrolle este tipo de cáncer pueden estar relacionadas con antecedentes de testículos no descendidos o el descenso tardío de los mismos, ya que el riesgo de malignidad en el testículo aumenta un 20 por ciento cuando se queda arriba más de un año por lo que se recomienda la extirpación total.
Hasta el 80 por ciento de los recién nacidos tienen los testículos en su lugar, mientras que del resto en el 90 por ciento de los casos desciende durante el primer año, por lo que es indispensable la revisión médica en los primeros instantes del nacimiento para determinar de inmediato la corrección de este problema. Además, la prevalencia del cáncer testicular es de dos a tres casos por cada 100 mil habitantes, mencionó el doctor González Gómez.
Una vez que se detecta una masa testicular sospechosa de cáncer se debe continuar con un ultrasonido testicular y la determinación de marcadores tumorales, lo que derivará en un diagnóstico; regularmente se recurre a una cirugía donde se extrae el testículo completo, se recomiendan sesiones de radioterapia o quimioterapia y un seguimiento por parte del oncólogo para identificar si hay metástasis hacia otros órganos, ya que este tipo de cáncer tiene la peculiaridad de diseminarse rápidamente.
Por lo anterior, el IMSS exhorta a la población para que se realice revisiones periódicas y acuda de inmediato con su médico para diagnosticar cualquier enfermedad de manera oportuna, con el fin de recibir el tratamiento adecuado para cuidar su salud y la de su familia.