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QUERÉTARO, Qro., 30 de mayo de 2024.- En una tensa reunión de la Organización Mundial de la Salud (OMS) celebrada el miércoles, más de 30 países condenaron enérgicamente los ataques de Israel contra hospitales en Gaza y demandaron un mayor escrutinio de su papel en la crisis sanitaria del enclave palestino.
La OMS ha documentado cientos de ataques a instalaciones sanitarias en los territorios palestinos ocupados, incluyendo Gaza, desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamás el 7 de octubre del año pasado. Sin embargo, la organización se ha abstenido de atribuir culpabilidad directa a alguna de las partes involucradas.
En el contexto de la última fase del conflicto, Israel ha lanzado una operación militar contra Rafah este mes, bloqueando el traslado de pacientes y prácticamente cortando el suministro de medicamentos. Esta acción ha puesto en riesgo el último hospital en funcionamiento en la región, exacerbando la ya crítica situación humanitaria.
Durante la asamblea anual de la OMS en Ginebra, un grupo de países ha respaldado una propuesta que solicita a la agencia sanitaria de la ONU intensificar la documentación sobre la catastrófica crisis humanitaria en Gaza. La moción también exige un informe detallado sobre la inanición en el enclave, en respuesta a las advertencias de la ONU sobre hambrunas y enfermedades tras casi ocho meses de conflicto.
Esta propuesta cuenta con el apoyo de más de 30 naciones, principalmente de África y la región del Golfo, pero también de países como Rusia, Turquía y China. Los representantes de estos países han expresado su profunda preocupación por las violaciones de derechos humanos y el deterioro de la situación sanitaria en Gaza.
«Es imperativo que la OMS desempeñe un papel más activo en la documentación y divulgación de la situación en Gaza. La comunidad internacional debe ser plenamente consciente de las atrocidades que se están cometiendo y de la urgente necesidad de intervención humanitaria,» declaró un delegado de Turquía durante la reunión.
Por su parte, Israel ha defendido sus acciones afirmando que sus operaciones militares están dirigidas contra objetivos de Hamás y que las instalaciones sanitarias han sido utilizadas por el grupo militante para almacenar armas y lanzar ataques. Sin embargo, estas justificaciones han sido recibidas con escepticismo y condena por parte de la comunidad internacional, que ha llamado repetidamente a la protección de civiles y de infraestructura crítica como hospitales.
La situación en Gaza continúa deteriorándose, con informes de escasez severa de alimentos, agua y suministros médicos. Las agencias humanitarias han advertido sobre un posible colapso total del sistema de salud en la región si no se toman medidas inmediatas.
La moción presentada en la OMS representa un esfuerzo significativo para aumentar la presión sobre Israel y buscar una solución a la crisis humanitaria. Si se aprueba, podría resultar en una mayor vigilancia internacional y en la posible implementación de sanciones o medidas de presión diplomática.