Alza en costos merma utilidades de las constructoras en Querétaro
QUERÉTARO, Qro., 30 de diciembre de 2023.- La meleagricultura es la actividad zootécnica, relacionada con la crianza de pavos Meleagris gallopavo. El pavo en sí es de origen americano, a diferencia de las demás aves domésticas, o de corral, que fueron traídas por los españoles durante la conquista. Sin embargo, solo el 10 % del consumo nacional de pavo es producido en México, el 84 % es importado de Estados unidos, el 4.5 % de Brasil y el 1.5% de Chile (Inforural, 2019).
En México, la meleagricultura es la tercera actividad avícola comercial de importancia, después de la producción de pollo de engorda y gallinas para la producción de huevo (UNA, 2019). El consumo de pavo en México varía durante el año y la mayor parte se comercializa durante las fiestas de fin de año, aunque el mercado se encuentra abastecido durante todo el año.
Principales productores
A nivel nacional, Yucatán ocupa el primer lugar en producción de pavo comercial con 23.5%, seguido del Estado de México (15%), Puebla (15%), Chihuahua (9%), Veracruz (8%), Hidalgo (7%), Tabasco (7%), Chiapas (5%), Guerrero (5%), Oaxaca y Campeche con el 3% cada uno (UNA, 2019). La mayor producción de pavo se realiza en los estados del sur y sureste de México.
El liderazgo en la producción comercial de pavo en Yucatán se debe a la demanda de carne asociada con la costumbre de consumir platillos gastronómicos tradicionales. Este liderazgo por consumo también se debe a la situación sanitaria en Yucatán, que está libre de muchas enfermedades avícolas, y por su situación geográfica, que favorece la importación de Estados Unidos de insumos para la producción meleagrícola.
Consumo y producción en México
En México, el consumo per cápita de carne de pavo y sus derivados es de 1.43 kg al año, lo cual es bajo en comparación con Estados Unidos, donde el consumo per cápita es de 7 kg al año (Ruiz, 2012). Esto implica que existe margen de oportunidad para incrementar el consumo per cápita de pavo en México.
Si bien puede ser difícil que una persona promedio compre un pavo entero para el consumo regular de la familia, el consumo per cápita se podría incrementar comercializando el pavo en cortes y piezas (filete de pechuga, piernas, muslos y alas). Otra área de oportunidad comercial es la elaboración de embutidos y productos procesados (nuggets, hamburguesas, jamones y salchichas).
Retos de la industria
Aunque la producción de pavo en México ha experimentado un crecimiento significativo, también enfrenta diversos retos que pueden afectar la industria.
Las enfermedades avícolas pueden representar una amenaza para la producción de pavo. Es esencial implementar medidas estrictas de bioseguridad para prevenir la propagación de enfermedades y mantener la salud de las aves.
Las variaciones en el clima pueden afectar las condiciones de cría de los pavos, como la disponibilidad de agua y temperaturas extremas. El cambio climático puede introducir incertidumbre en la producción y requerir adaptaciones en las prácticas agropecuarias.
Por otro lado, los costos de los insumos, especialmente el alimento para pavos, pueden ser volátiles y afectar la rentabilidad de la producción. Fluctuaciones en los precios de los granos utilizados en la alimentación de los pavos pueden impactar significativamente los costos de producción.
Seguridad alimentaria
De igual forma, la industria avícola está sujeta a regulaciones estrictas en cuanto a seguridad alimentaria, bienestar animal y buenas prácticas pecuarias. Cumplir con estas normativas puede ser un desafío para algunos productores, especialmente los pequeños avicultores.
Como ya se mencionó, la producción de pavo en México compite con la importación de carne de pavo de otros países. La competencia internacional puede afectar los precios y la participación de mercado de los productores nacionales.