Un vecino distante, desconfiado y colérico nos vigila
Arrancamos el sexto año de gobierno con un ejercicio de imaginación.
Imaginen, por un momento, que el presidente mexicano de los últimos cinco años se pudiera llamar Felipe Calderón o Enrique Peña Nieto.
Sí, pueden poner el nombre de gusten –de los dos arriba propuestos–, al presidente que hoy despacha en Palacio.
Ahora imaginen que, cualquiera de esos dos presidentes, hubiese dado los resultados desastrosos que todos conocemos hoy, luego de cinco años del agonizante sexenio de la mal llamada “transformación”
¿Pueden adivinar la escandalera que hoy habría armado el formidable líder social llamado, López Obrador, ante el fracasado gobierno de Calderón y/o de Peña Nieto, en el último quinquenio de gobierno?
¿Imaginan la potencia de las manifestaciones callejeras, las protestas, la cantidad incontable de marchas y plantones al Zócalo, en repudio por el mal gobierno de Calderón y/o Peña?
¿Imaginan la exigencia generalizada para que renuncie a su cargo el presidente Calderón y/o Peña por su mal desempeño; exigencia encabezadas por “la fuerza moral de ese siempre congruente” líder de apellido López?
¿Imaginan las tronantes campañas a través de “las benditas redes” para denunciar con hechos y datos duros, el fracaso sexenal de Calderón y/o Peña en el actual gobierno?
¿Imaginan la contundencia de la denuncia pública, por casi 200 mil mentiras que les habrían probado hoy a los presidentes, Calderón y/o Peña?
¿Imaginen, por un momento, la escandalera nacional e internacional por la peligrosa militarización de la vida nacional que durante años y de manera pública denunciaron, tanto AMLO, como Mario Delgado, Manuel Bartlett y muchos otros críticos de los fallidos gobiernos del PRI y del PAN?
¿Imaginen las campañas internacionales, ante la ONU y organismos globales, por la sumisión del gobierno de Calderón y/o Peña Nieto a dictaduras como la cubana, venezolana, nicaragüense y la mafia rusa?
¿Y qué tal las denuncias de López y sus “congruentes amigos” que acuden al mundo para condenar esa intolerable alianza de los gobiernos de Calderón y/o Peña con las mafias criminales de Sinaloa y Jalisco?
¿Imaginan la cantidad de paros, bloqueos y saqueos producto del justificado enojo social, por “los gasolinazos” que hoy obligan a los ciudadanos a pagar casi 27 pesos por litro de gasolina Premium?
¿Recuerdan la escandalera de AMLO a causa del Fobaproa? ¿Pues ahora imaginen lo que harían los opositores de la dizque izquierda mexicana a causa de la deuda de 6 billones de pesos que habrían contraído los gobiernos de Calderón y/o Peña? ¿Imaginen el discurso incendiario de Obrador y de todo su grupo político por esa deuda impagable en cien años?
¿Y que tal ese “tonel de rica miel” que significaría para los opositores de Calderón y/o Peña la destrucción del sistema público de salud? ¿A poco no ya habrían desatado una campaña internacional para denunciar al inútil gobierno de Calderón y/o Peña por privatizar la salud, la educación y, en general, por destruir todos los servicios públicos?
¿Y ahora imaginen lo que harían los opositores al PRI y al PAN, luego que los gobiernos de Calderón y/o Peña habrían tolerado un baño de sangre por todo el país, hasta llegar a casi 200 mil vidas perdidas a causa de la violencia y contabilizar 60 mil desaparecidos, más de 10 mil feminicidios, miles de masacres y el crimen de miles de jóvenes?
¿Piensen, por un momento, como habrían motejado López y sus “moneros” aliados al sangriento gobierno de Peña y/o Calderón, luego de esas cifras de terror?
“¿Gobierno de la muerte”, “país de sangre”, “gobierno mortal”, “sexenal baño de sangre”, “país de sangre”..? ¿Cuál de esos nombres le habrían puesto AMLO y sus caricaturistas a la gestión de Calderón y/o Peña?
¿Ahora imaginen, por un momento, que Calderón y/o Peña realizaran “mañaneras” diarias en las que, también a diario, atacaran al candidato presidencial, AMLO; que lo ridiculizarán y descalificaran para impedir que pueda llegar al poder en el 2024? ¿Imaginan la reacción de AMLO y de toda su claque frente a ese ataque a la democracia?
¿Ahora piensen, por un momento que los presidentes Calderón y/o Peña fueran capaces de violentar a diario las reglas del INE, del Tribunal Electoral; que hubiesen violado la Constitución uy secuestrado la división de poderes y los órganos de transparencia? ¿Imaginen que las locuras de Calderón y/o Peña colocaran en riesgo la democracia al organizar un escandaloso fraude electoral, al imponer a su preferido para la elección presidencial?
¿Imaginen que en el gobierno de Calderón y/o de Peña se hubiesen asesinado a casi 80 periodistas? ¿Imaginen a quien habría acusado AMLO, por el atentado a Ciro Gómez Leyva, en el gobierno de Calderón y/o de Peña?
Si llegaron el final del texto, es momento de volver a la realidad. Y sí, la realidad confirma que el de López es peor gobierno que las gestiones de Felipe Calderón y Peña Nieto: En realidad es el peor gobierno de la historia.
¿Lo dudan?
Al tiempo.
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