Los límites de la complacencia
· SCT: un subsecretario en funciones de secretario
· Y lo mete en problemas un sindicalista sin plaza
· Alarma a los gobernadores apretón de Joe Biden
Comunicaciones y Transportes es una secretaría con mala estrella.
Al menos en este sexenio.
Javier Jiménez Espriú renunció a la SCT cuando le quitaron el control de los puertos para dárselos a la Secretaría de Marina (Semar).
Llegó Jorge Arganis Díaz, un funcionario de casa.
Pero el 23 de marzo se le ocurrió, como antes lo hizo su antecesor con las terminales marítimas, criticar la entrega de las obras de su sector a las Fuerzas Armadas.
Fustigó en esa ocasión:
“En lo personal, considero muy importante que seamos los profesionales de la ingeniería civil quienes la dirijan y tengan en sus manos la responsabilidad de guiar su camino”.
Todavía aventuró:
“A lo mejor me corren por eso, pero ahora están de moda los ingenieros militares”.
Formalmente sigue al frente, pero…
En los hechos el responsable de las principales funciones es el subsecretario de Transporte, Carlos Alfonso Morán.
A él se dirigen de Palacio Nacional y titulares de otras dependencias para temas importantes, lo cual le da fama de secretario sin cartera.
FALSO SINDICALISTA
Así le ha explotado una bomba.
El presunto dirigente de los controladores aéreos, Alfredo Covarrubias, declaró ayer: el rediseño del espacio aéreo pone en riesgo el tráfico.
Han estado a punto de registrarse 30 choques de aviones en 15, precisó Covarrubis en noticieros.
Pero no hay reporte alguno.
No se ha cuestionado, públicamente al menos, su inactividad desde hace 20 años y su despido hace meses porque no tenía oficio ni beneficio en Servicios a la Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) de Víctor Manuel Hernández.
La aviación tiene muchos ángulos.
Uno de ellos lo dimos a conocer aquí 8 de abril: el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) carece autorización para operar.
Un incumplimiento de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC) de Carlos Antonio Rodríguez y de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) de Oscar Artemio Argüello.
Hoy un controlador aéreo sin plaza los pone en jaque.
APRETÓN DE BIDEN
Los gobernadores del sur ya se cansaron.
Son quienes más sufren los embates de los migrantes y, para colmo, el gobierno de Joe Biden aprieta más cada día.
Por eso se reunieron ayer con el presidente y le pidieron aclarar muchas cosas y, sobre todo, liberar recursos.
Las naciones centroamericanas, sobre todo el triángulo Guatemala, El Salvador y Honduras, necesitan los recursos congelados en el Banco del Bienestar.
Por anuncios oficiales y promesas de apoyo de México y Estados Unidos no ha parado, pero sí por falta de materialización de ayuda coordinada por el canciller Marcelo Ebrard.
Bueno, en realidad de su cuñada Viviana Bueso Ausfura, cuyo desempeño ha sido personajes calificados como el embajador Agustín Gutiérrez Canet.
Los gobernadores claman por mayor atención social a un problema cuyo descuido puede generar un conflicto mayúsculo.
La crisis humanitaria pasaría de la frontera norte al sur, justo como Donald Trump y Joe Biden han recorrido la vigilancia militar.
En ese esfuerzo están los gobernadores Rutilio Escandón (Chiapas), Adán Augusto López (Tabasco) y Carlos Joaquín (Quintana Roo).
Los más afectados pero no los únicos