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CIUDAD DE MÉXICO., 5 de abril de 2021.- El abasto de medicamentos para los próximos meses en el sector público es incierto. Ante los problemas en la compra consolidada internacional de fármacos que impulsó el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para este año, de la mano con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), los directores de los institutos nacionales de salud, hospitales y autoridades sanitarias de las 32 entidades federativas han recibido instrucciones de comprar por su propia cuenta más de un millar de claves de medicinas y material de curación para evitar su desabasto.
De acuerdo con un reporte del Instituto Farmacéutico Médico (Inefam), los medicamentos que corren riesgo de escasear en los anaqueles de los hospitales públicos incluyen productos básicos como el amlodipino, utilizado para tratar la hipertensión y enfermedades cardiacas; la loratadina y la clorfenamina, para pacientes alérgicos, y la insulina, vital para los diabéticos.
La UNOPS asegura que la entrega de medicamentos se ha cumplido según lo comprometido y garantiza que para finales de abril se tendrán los resultados de las licitaciones internacionales que aún se negocian, para continuar con la entrega de los medicamentos en mayo.
El pasado 26 de febrero, el coordinador de Abasto del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Adalberto Javier Santaella Solís, giró una circular a todos los directores de los institutos públicos de salud federales y de las 32 entidades federativas.
En el oficio INSABI-UCNAMEMCA-91-2021, el funcionario les solicitaba comprar con sus propios medios mil 391 claves de medicamentos y materiales de curación que no fueron incluidos en la compra consolidada internacional que hizo el Gobierno federal, además de 227 claves que no tuvieron oferta en los procesos de licitación.
Aun en los medicamentos que sí fueron incluidos, la circular requería a los titulares de cada unidad realizar contratos para garantizar su abasto hasta junio, en tanto iniciaba el proceso de suministro de la compra acordada.
“En lo que corresponde a las claves sin oferta de los procedimientos ITB (llamado a licitación), llevados a cabo por la UNOPS, las instituciones deberán garantizar el abasto al mes de junio de 2021, en tanto el Insabi realiza el procedimiento de contratación para el suministro de los meses de julio a diciembre de 2021.
“Por lo que se refiere a las claves que sí cuentan con oferta en los procedimientos de ITB realizados por la UNOPS, las instituciones participantes deberán realizar las acciones que consideren necesarias, para contar con abasto suficiente hasta el mes de junio de 2021… en lo que las entregas puedan empezar”, agrega el oficio.
El Inefam señala que para la compra consolidada de la UNOPS de 2021 hubo 141 claves de medicamentos sin oferta en los procesos de licitación —86 menos que los reconocidos por el Insabi—, los cuales equivalen a 40.6 millones de piezas por un monto de 14 mil 115.8 millones de pesos.
Entre estos medicamentos destaca el amlodipino con Irbesartán, fármaco que se volvió popular en febrero de 2018, cuando López Obrador, siendo aspirante a la Presidencia de la República, recomendó usarlo a Enrique Peña Nieto para aplacar sus nervios y no se inmiscuyera en la elección federal que tuvo lugar ese año.
Pero más allá del mensaje irónico del tabasqueño, este medicamento es usado para tratar la hipertensión arterial y combatir problemas cardíacos.
Para este fármaco la UNOPS abrió una oferta para la compra de 11.7 millones de piezas, por un monto de 11 mil 100.6 millones de pesos, la cual quedó desierta por falta de oferentes.
El fracaso de la compra consolidada de este medicamento ha provocado que algunos hospitales comiencen a adquirirlo por su cuenta para evitar su escasez, revelan datos del portal de compras gubernamentales Compranet.
En febrero, el IMSS realizó tres compras de Amlodipino con las empresas Gadmar, Proveedora de Medicamentos Doca y Farmacia Margarita.
Adquirió 154 mil 759 piezas por un monto de 1.8 millones de pesos, cantidad que representa apenas 1.3 por ciento de las piezas de amlodipino solicitadas por la UNOPS en la compra consolidada.
José Carlos Ferreyra, presidente del Inefam, indicó que esta compra estuvo mal desde el planteamiento, ya que además de que la clave del medicamento era incorrecta, era ilógico que se destinaran más de 11 mil millones de pesos a un solo fármaco cuando, por ejemplo, el gasto anual de todo el grupo de oncología del sector público es de 15 mil millones.
Además del amlodipino, el reporte del Inefam destaca la loratadina y la clorfenamina entre los medicamentos sin oferta en la licitación de la UNOPS, ambos utilizados para tratar alergias.
Del primero, el organismo de la ONU solicitó 5.4 millones de piezas por cerca de 28.8 millones de pesos. Al quedar desierta la oferta, el IMSS recurrió a hacer una compra de seis mil 865 frascos de loratadina a la empresa Gadec, por la que pagó 65 mil 904 pesos, según datos de Compranet.
El IMSS adquirió a la misma empresa 478 frascos de clorfenamina, por tres mil 671 pesos, una compra mínima comparada con las más de cinco millones de unidades que solicitó la UNOPS.
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