El agua, un derecho del pueblo
No, no es una broma.
Tampoco se trata de un bulo, una exageración o una noticia falsa.
No, en realidad es, simple y llanamente, la comparación del número de muertes producto de la violencia y de la pandemia de Covd-19, en México, con los muertos producto de las bombas atómicas lanzadas el 6 y el 9 de agosto de 1945, en Hiroshima y Nagasaki, respectivamente.
Pero vamos por partes.
En su momento, el gobierno japonés estimó que las víctimas mortales, de manera directa, por el estallido de las bombas nucleares –sin sumar las muertes posteriores ocasionadas por las secuelas, ya no se conocían los efectos posteriores–, habrían sido, en números redondos, de 100 mil japoneses.
Al día de hoy –75 años después de la conflagración atómica–, durante los primeros 19 meses con 14 días del gobierno de López Obrador, en México han muerto alrededor de cien mil personas; una cifra idéntica, según datos oficiales, al número de víctimas de las bombas atómicas.
¿Y, de dónde sale la cifra de cien mil muertos en el gobierno de López Obrador? Todos lo saben.
Vale recordar que, durante los 19 meses, con 14 días del gobierno de Obrador, han muerto poco más de 60 mil mexicanos, a causa de la violencia criminal, además de los casi 40 mil muertos producto del fracaso en la lucha contra la pandemia de Covid-19.
Pero no es todo.
Según especialistas en la progresión epidemióloga del Covid-19, al finalizar el mes número 20 de gobierno de López Obrador, las muertes por la pandemia en México habrán desbancado al número de muertes a causa de la violencia y, por tanto, la suma de las dos variables –muertes violentas y muertes por la pandemia–, arrojaría un gran total de mortandad superior a los 130 mil mexicanos fallecidos.
¿Y eso qué significa?
Que, al finalizar el mes número 20 del gobierno de AMLO –luego de los primeros 600 días de gestión–, las cifras mortales arrojarán que el número de ciudadanos fallecidos en México será superior al 30 por ciento de los muertos provocados por las bombas atómicas lanzadas en las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki.
¿Quiere decir lo anterior que habría sido más letal el gobierno de AMLO, para los mexicanos, que el ataque nuclear para los japoneses?
En efecto, los números fríos y los datos duros dejan claro que un mal gobierno, como el de López Obrador –que tolera la violencia criminal y no atiende correctamente una pandemia como la del Covid-19–, resulta tanto o más mortífero y más negativos para sus ciudadanos, que la más letal de las armas conocida en el mundo, a lo largo de la humanidad, como la bomba atómica.
¿Pero qué significa la estimación de 130 mil muertes en sólo 20 meses de gobierno?
Que en México asistimos a una aterradora mortandad de algo así como seis mil 500 muertos al mes; igual a 216 muertes al día o, si se quiere, poco más de nueve mexicanos muertos cada hora; un mexicano muerto cada siete minutos; sumadas las muertes violentas y las muertes por la pandemia del siglo.
Claro, todo ello sin tomar en cuenta las muertes violetas y las muertes por la pandemia que no se reportan de manera oficial.
Como quiera que sea, al 12 de julio del 2020, México se coloca en el nada honroso cuarto lugar mundial de muertes por coronavirus, si se toma en cuenta que, de manera oficial, se han reportado más de 35 mil muertes por Covid-19; cifra que no incluye por lo menos un tercio de muertes no reportadas y que se provocaron por causas o aclaradas.
Además, el índice de letalidad del Covid-19 en México es de 11.7 por ciento de muertos por cada cien contagiados; la letalidad más alta del mundo.
Todo ello sin considerar que hasta el 12 de julio el número de contagios se había elevado en 15 por ciento y el número de muertos en 13 por ciento, sólo respecto a la semana anterior.
En pocas palabras, el gobierno de México, el de López Obrador, pronto provocará más muertes, por la violencia y/o por la pandemia, que las muertes que hace 70 años provocó la más mortífera de las armas conocidas, la bomba atómica.
¡Ese es el tamaño de un mal gobierno, como el de AMLO!
¿Y, aún dudan que López Obrador es un peligro para México y para el mundo?
Se los dije.
Al tiempo.