Ambiente fresco y despejado en Querétaro
QUERÉTARO, Qro., 15 de mayo 2020.- La directora del Centro de Geociencias en la UNAM Juriquilla, del Lucía Capra, directora aseguró que en el planeta está cambiando el régimen de lluvias, que aunque caiga la misma lluvia acumulada en promedio, se precipita en menor número de eventos.
“En menos tiempo cae la misma cantidad de agua, es como si vaciara una cubeta en una hora o lo hiciera en cinco minutos, si lo hago de golpe causará más afectación a que si la vació poco a poco. Si cae más lento la tierra tiene más oportunidad de infiltrar, pero si a la cantidad de lluvia le sumamos el cambio de uso de suelo y ahora se cubre de cemento, esa agua no recargará el acuífero y escurrirá en la superficie. Esto ocurre en Querétaro; por el crecimiento urbano que se da en lomas y relieves que antes eran reservas naturales y ahora son fraccionamientos, el agua tomará otro camino, y ese camino serán las calles”, advirtió la académica de la UNAM.
La doctora comentó que se pueden hacer obras de mitigación de ingeniería o incluso obras de mitigación con barreras naturales, que no impactan el ambiente y armonizan con el entorno, obras que impedirán grande escurrimientos y posibles daños.
El incremento de incendios por las olas de calor y sequías, provocó en Jalisco un gran incendió en el Bosque de la Primavera, derribó árboles y quedó mucha ceniza, la cual convierte al suelo el hidrofóbico,
“Al caer las lluvias el agua escurre, pero no penetra en el suelo, y en el pueblo de San Gabriel en Jalisco, la ladera detrás del pueblo se formó un flujo de agua y lodo. Inundó al pueblo, murieron tres personas y causó daños severos a la población”, recordó Lucía Capra el evento ocurrido hace un año.
En el tema de volcanes, la doctora en vulcanología ha realizado diversos estudios con el Popocatépetl y el Volcán de Colima.
Los daños ahora se presentan en zonas donde el hombre no conoce estos fenómenos, en zonas que no eran frecuentes, ya que ante los cambios del uso de suelo la gente lo tomará por sorpresa.
El cambio climático y el cambio de uso de suelo son la combinación perfecta para que se presenten estos deslaves. El clima es más complicado de controlar, pero sí el uso del suelo. Ahí es mucho más notoria la mano del hombre.
Con información de AM Querétaro