Diario Legislativo/Pedro Jiménez Rodríguez

* ¿Ifigenia y Porfirio apoyan a Emilio Suárez?

Como estarán las cosas, que ahora que acaba de presentar Mauricio Farah Gebara su renuncia con carácter de irrevocable, a la secretaría general de la Cámara de Diputados, surge como su probable sustituto en el cargo un priísta.

Se trata de Emilio Suárez Licona, un joven abogado que estuvo en la lista del PRI a una candidatura plurinominal, pero no alcanzo curul.

Lo malo no es su pasado priísta, sino que Emilito como se le conocía cuando era secretario particular de Guillermo Haro Belchez, Secretario General de la Cámara de Diputados hasta la 61 Legislatura, incurrió en muchos agravios a la persona del hoy presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.

Es que Emilio Suárez Licona fue representante del PRI ante el Instituto Nacional Electoral (INE), y desde ahí bombardeo a López Obrador con acusaciones diversas, pero sobre todo por el desvió de recursos del Fideicomiso creado para apoyar a los damnificados del sismo del 2017.

Por esas acusaciones que hizo ante el INE, el instituto decreto una multa millonaria a Morena, misma que más tarde el TRIFE les perdonó.

Bueno, pues a pesar de que se ganó muchas felicitaciones en el PRI y con sus jefes en esos tiempos, hoy Emilio Suárez Licona pretende convertirse en Secretario General de la Cámara de Diputados y presume que tiene el apoyo de dos dinosaurios enquistados en Morena.

Suárez Licona presume que Porfirio Muñoz Ledo, actualmente presidente de la Cámara de Diputados, y la senadora Ifigenia Martínez, lo están apoyando para ocupar la Secretaría General.

Tal vez logre su objetivo y se convierta en el poderosos secretario general de la Cámara de Diputados, al fin que en Morena se perdona todo y a todos, y por eso dice mucha gente que AMLO todo será gatopardismo, que no habrá cuarta transformación, se maquillarán para que todo siga igual.

EL PULSO.- Por cierto, ya circula la lista de las 43 comisiones que serán aprobadas por el pleno para el trabajo legislativo. De hecho, fueron eliminadas 13 comisiones ordinarias y todas las especiales, y según dicen ya hasta se repartieron las presidencias y secretarías y todos quedaron contentos, como diría el cuento inglés, todos felices, comieron perdices** Habrá que ver cuáles les dejan a los panistas y priístas, pero Morena se quedara por lo menos con la mitad y repartirá la otra parte entre PAN y PRI, y la chiquillada* Por cierto, cualquiera diría que no tiene la menor importancia ser presidente o secretario de una comisión, sobre todo ahora que ya quitaron los sobresueldos y prebendas que se les daban a esos diputados de primera, pero si tiene importancia, pues es un secreto a voces que los presidentes y secretarios de las comisiones legislativas son incluidos en la nómina de las secretarías, es decir el que preside la de Hacienda, tiene su iguala y también el secretario** Y por último habrá que repetir lo que dijo un priísta, respecto a la repartición de las comisiones: “Nos fue bien, no tan bien como queríamos, pero si mejor de lo que merecemos por lo reducido de nuestra bancada”.

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