Iniciamos era de esperanza, amor y compromiso por Puebla: Armenta
CIUDAD DE MÉXICO, 19 de septiembre de 2018.- Aun cuando no se pueden predecir los terremotos, científicos del Instituto Politécnico Nacional (IPN) trabajan en una metodología enfocada hacia el posible pronóstico de grandes sismos utilizando algoritmos de identificación de patrones de quietud sísmica, precursores de movimientos telúricos grandes, con los cuales sea posible advertir cuándo una zona está suficientemente madura para generar un evento de gran magnitud y alertar a las organizaciones de protección civil.
Los especialistas Fernando Angulo Brown y Adolfo Helmut Rudolf Navarro, de la Escuela Superior de Física y Matemáticas (ESFM), emplean algoritmos para identificar patrones de quietud sísmica significativa, así como el monitoreo e identificación de señales electrosísmicas, ambas precursores de grandes sismos.
De acuerdo a un comunicado del IPN, también aplican modelos de física no lineal para estudiar el comportamiento de la corteza terrestre y analizan si las variaciones de los campos electromagnéticos que se presentan previamente a un sismo pueden tomarse como señales válidas para pronosticar estos fenómenos.
Al referir que México es un país con un alto potencial sísmico, los investigadores indicaron que tienen previsto instalar una estación electrosísmica en la población de San Marcos, en el estado de Guerrero, en donde tuvo lugar el terremoto de 1957.
El propósito es monitorear la zona y advertir ante una situación de peligro. Angulo Brown, miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) Nivel III, comentó que desde hace más de 25 años aplican metodologías que arrojen indicios para prender focos amarillos ante la posibilidad de etapas de inminencia de sismos.
Continúa en Quadratín México