Unos Doritos que cuiden al campo mexicano, la meta de PepsiCo
CIUDAD DE MÉXICO, 22 de junio de 2018.- En las instituciones públicas, poco más de 60 por ciento de los servidores públicos se ubicaban en el rango entre los 30 y 49 años de edad, tanto en las instituciones del ámbito estatal como del federal.
A diferencia de lo que se observa en el resto de la economía, donde 30 por ciento del personal ocupado tenía entre 18 y 29 años de edad, en el gobierno los jóvenes representaban alrededor de 15 por ciento del personal ocupado en las administraciones locales y 11.5 por ciento en la administración pública federal.
Al presentar información estadística sobre algunos aspectos en que las administraciones públicas federal y estatal en México pueden contribuir a mejorar la calidad de vida de las generaciones futuras en condiciones de mayor igualdad de oportunidades y reconociendo la importancia de cuidar el medio ambiente, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) detalló que en 2016 las administraciones públicas estaban integradas por 4 203 475 servidores públicos, de los cuales 39 por ciento laboraba en el ámbito federal y 61 por ciento en las administraciones estatales. De acuerdo con la función que desempeñaban, se observa que la mayor parte del personal estatal laboraba en instituciones educativas, ya sea de nivel básico, media superior o superior, las cuales concentraban 51.1 por ciento del personal; en tanto que 14.7 por ciento de los servidores públicos estatales estaban adscritos a instituciones dedicadas a la salud, y 14.4 por ciento en instituciones de justicia, que incluye seguridad pública, procuración e impartición de justicia.
En el ámbito federal, 33.1 por ciento de los servidores públicos trabajaban en dependencias de seguridad social y 21.4 por ciento en educación.
Respecto a la capacidad de atención a la población, en 2016 había 344 servidores públicos por cada diez mil habitantes a nivel nacional, de los cuales 210 laboraban en las administraciones públicas estatales y 134 en la administración pública federal. A nivel estatal se encontraron diferencias significativas.
Por ejemplo, en entidades como Puebla, Sinaloa y Coahuila de Zaragoza había menos de 100 servidores por cada diez mil habitantes. En estados como Tabasco, Guerrero, Colima, Nayarit, Baja California Sur, Zacatecas, Yucatán, Durango, Hidalgo y Ciudad de México había más de 300 servidores por cada diez mil habitantes.
Respecto a la distribución de los servidores públicos por sexo, con excepción de las instituciones del ámbito de procuración de justicia -tanto federal como estatal- donde la proporción de hombres fue mayor a la de mujeres, en general se encontró una distribución equivalente de hombres y mujeres laborando en las administraciones públicas. Esto contrasta con la distribución observada en el resto de la economía donde el 61.8 por ciento de los trabajadores eran hombres y 38.2 por ciento mujeres.
Al centrarnos en las instituciones de los gobiernos estatales se observa que en la mayoría de las entidades las mujeres representaban más de la mitad del personal laborando en las administraciones públicas estatales, con excepción de la Ciudad de México, Oaxaca y Chiapas donde alrededor de 6 de cada 10 servidores públicos eran hombres. Sin embargo, al analizar la distribución de los puestos de dirección, apenas uno de cada cuatro titulares de esas dependencias eran mujeres, y en Chiapas esta razón fue solo de uno de cada 10 funcionarios titulares.
Otro aspecto importante por analizar es la equidad en las remuneraciones de los servidores públicos. En todos los ámbitos de gobierno persiste la inequidad salarial por sexo, ya que la proporción de mujeres que recibía más de 20 mil pesos mensuales era menor que la de hombres. Asimismo, en el ámbito federal se encontró una mayor diferencia entre los que más y menos ganaban.
Mientras que en el ámbito estatal alrededor de 50 por ciento de los servidores ganaban entre 10 mil y 20 mil pesos mensuales, menos de 20 por ciento de los empleados federales se encontraban en este rango salarial, ya que más de 50 por ciento de los servidores públicos del gobierno federal ganaban menos de 10 mil pesos mensuales, con excepción de las instituciones de justicia donde se observaron las remuneraciones más altas.
La información estadística proviene de los censos nacionales de gobierno y de la Encuesta Nacional de Calidad e Impacto Gubernamental 2015 y 2017, los cuales son parte de los proyectos que el INEGI realiza en el marco del Subsistema Nacional de Información de Gobierno, Seguridad Pública e Impartición de Justicia.
Lee más en Quadratín México