PRI abandonó a la gente; cambiar nombre y color no es solución: Madrazo
QUERÉTARO, 12 de abril de 2016.- Con temas como la regulación de la tecnología en los espacios públicos y el reconocimiento de la seguridad como un derecho de los ciudadanos, el estado se distingue a nivel nacional por sus aportes al sistema de justicia penal adversarial, afirmó el Secretario de Gobierno estatal, Juan Martín Granados Torres.
Luego de reunirse con integrantes de la Junta de Concertación Política de la Legislatura Local, para abordar el tema del nuevo sistema justicia y el proyecto Cosmos, el secretario recordó que faltan 115 reformas e iniciativas de ley en diferentes áreas para el nuevo sistema.
Subrayó que el estado se convierte en un referente nacional por sus aportes al sistema, sobre todo en el marco jurídico, toda vez que se identifican avances por parte de la Secretaría Técnica de la Secretaría de Gobernación que coordina la implementación del sistema acusatorio penal, así como por la embajada de Estados Unidos.
El marco jurídico para el estado establece la seguridad como un derecho de los ciudadanos y la corresponsabilidad para participar en la prevención del delito, la seguridad pública se mantiene como una responsabilidad del estado, además que la seguridad y la justicia se enfocan como un solo sistema, que permite que los policías estén preparados para acudir a los tribunales de justicia.
“Sobre todo la zona metropolitana y en el caso San Juan del Río implica una evolución del concepto de seguridad, no podemos atender y seguir sosteniendo la seguridad pública, de nuestras calles, el orden y la paz pública a partir de patrullajes, de esquemas personalizados de vigilancia de policías, ni nos van a alcanzar los policías”, advirtió.
El nuevo sistema, dijo el secretario, contempla la tecnificación de los espacios urbanos o tecnología en los espacios públicos, como un mecanismo de paz y seguridad para los ciudadanos, pero esa tecnología requiere una regulación para garantizar los derechos humanos.
Agregó que el estado se distingue por la construcción de una herramienta para seleccionar al personal, a partir de su propio perfil psicológico, capacidades y valores, para garantizar que ocupan el puesto que deben tener.