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LONDRES, RU., 5 de marzo de 2015.- El titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SCHP), Luis Videgaray, confirmó que el gobierno mexicano planea recortes significativos del gasto público rumbo a 2016, ello para hacer frente a los menores ingresos por la depreciación del precio petróleo en tierra azteca.
De acuerdo al portal SinEmbargo, Videgaray subrayó la importancia de “fortalecer la posición financiera del país para afrontar un probable escenario adverso”, ello en el marco de su gira por Reino Unido en compañía del presidente Enrique Peña Nieto, donde apuntó que el mandatario y su comitiva ya se encuentran esquemando el presupuesto de egresos para el año próximo, “mismo que entregaremos a la cámara de diputados en septiembre”.
“Debemos estar preparados para un escenario de menores ingresos. Si los precios del petróleo se mantienen en niveles como los que hoy prevalecen, es altamente probable que tengamos menores ingresos que en el pasado y, ante ello, nos tenemos que preparar para gastar menos y gastar mejor”, dijo el Secretario en entrevista con EFE.
Videgaray, que en enero anunció una reducción “preventiva” del 0.7% para el Producto Interior Bruto (PIB) 2015, indicó se incluirían más recortes rumbo al siguiente año “porque hay que estar preparados para un escenario en el que el precio del petróleo se mantiene bajo y la producción desciende”.
El responsable de Hacienda, dijo igualmente que, aunque se espera que la venta de crudo mexicano caiga este año a 2.4 millones de barriles diarios, “esta se recuperará cuando llegue más inversión extranjera. Somos optimistas en cuanto a la futura producción una vez se consolide la reforma del sector energético, ello con base a la credibilidad de la política económica y fiscal mexicana”, misma que “está fuera de duda”.
VUELVEN A REBAJAR EL PIB
Aunque Videgaray advirtió que la situación “de ninguna manera se asemeja a la crisis del 1994”, pues el país está “mejor preparado para hacer frente a escenarios adversos” (gracias a la flexibilidad del tipo de cambio y buen nivel de reservas, por sólo citar conforme a la SCHP), la realidad es otra.
Trascendió en El Economista que, este jueves, el Banco de México (Banxico) redujo su previsión de crecimiento para México rumbo al primer trimestre de 2015, ello al posicionar sus expectativas en un 3.08% de desarrollo del PIB, ello cuando a principios del año se pronosticaba un 3.29%.
Un grupo de 33 especialistas consultados por el Banxico consideraron que los principales factores que podrían obstaculizar el crecimiento económico de la República serían, en orden de importancia:
1. Los problemas de inseguridad pública (24% de las respuestas).
2. El precio de exportación del petróleo (16%).
3. La debilidad en el mercado interno (13%).
4. La inestabilidad financiera internacional (12%).
5. La política fiscal que se está instrumentando (10%).
En este nuevo reporte, los expertos consultados por la institución bancaria también coincidieron con el “escenario negativo de Hacienda y Crédito Público, disminuyendo la perspectiva de crecimiento para el 2016 de de un glorioso 3.80% hasta recortarla a 3.63%.
Tal y como recoge El Economista, los ajustes a la baja en las estimaciones de crecimiento de la economía mexicana “le juegan rudo a la SHCP”, dado que, tan sólo en los dos primeros años de la administración del presidente Enrique Peña Nieto se han realizado 8 ajustes al pronóstico del PIB.
El medio impreso cita que hay 5 motores de crecimiento para que el país pueda alcanzar una economía estable, sin altibajos y sin imprecisiones, que son: el consumo, la inversión, el sector externo, la reforma fiscal… y el dólar.
SE DISPARA EL SÚPERDOLAR A 15.55
En ese sentido y al momento, CNN Expansión reporta que la moneda estadounidense se cotiza hasta en 15.55 pesos en ventanilla, lo que representa un alza de 20 centavos respecto al cierre del miércoles 3 se marzo. “Este es su nivel más alto desde marzo de 2009, cuando el billete verde se ofrecía en 15.69 unidades”, precisa la nota informativa al añadir que la divisa americana se apreció por causa de las bolsas europeas.
Y es que tal y como reseña El Universal, fue este mismo jueves que el Banco Central Europeo (BCE) decidió mantener sin cambios sus tasas de interés para la comuna del bloque de potencias aliadas en “el viejo mundo”, de manera que su presidente, Mario Draghi, señaló que iniciará con una compra de bonos de la deuda el próximo 9 de marzo.
La medida de contingencia se realizará por un monto de 60 mil millones de euros y se realizará, mes con mes y por la misma cifra, hasta septiembre de 2016 a fin de mantener “en su lugar la inflación”, lo que provocó que el euro se depreciara por debajo de 1.11 dólares (el valor mínimo desde hace 11 años) durante la jornada cambiaria de este jueves.
Este día al dar a conocer los resultados de su encuesta a especialistas de sector privado, el Banco de México (Banxico) refirió que los analistas revisaron al alza su estimación para el tipo de cambio en este año. Esperan que se ubique en 14.54 pesos por dólar, frente a los 14.18 pesos que habían pronosticado en enero.
¿Y QUÉ QUIERE DECIR TODO ESTO?
El Producto Interno Bruto (PIB) es una medida del valor de la actividad económica de un país que, básicamente, “calcula cual fue la producción en bienes y servicios que se hizo en un país durante un periodo de tiempo determinado.
“El cálculo incluye el consumo de bienes (por ejemplo, comprar un carro, leche, pan); el consumo de servicios (corte de cabello, servicio financiero, plomería); inversión (gasto de las empresas para mayor producción en las mismas); el gasto del gobierno (presupuesto destinado a programas sociales); y compras en el exterior e interior del país (exportaciones e importaciones)”, establece la web de Cuadre Su Bolsillo.
En ese sentido, la rebaja a la perspectiva del PIB significa que el ingreso promedio de cada uno de los mexicanos recibirá un golpe financiero, puesto que se trata de una cadena cíclica: todo lo que producen las empresas (bienes o servicios) es consumido por los connacionales, “esto constituye más ingresos y mejores utilidades para las compañías, lo que se traduce en capacidad para contratar personal, que en otras palabras, afecta a ese mismo consumidor dependiendo de cómo se comporte el PIB”.
Si a la ecuación sumamos la recaudación tributaria, misma que será diluida, se produce un menor gasto público, y puesto que, en palabras de Videgaray, “el gobierno tendrá que ajustarse el cinturón”, el embate se traduce ultimadamente en un recorte de programas sociales y (supuestamente) recursos para funcionarios públicos.
“Entre más empleo se genere, más capacidad de consumo tienen los hogares, porque traen el salario a su casa y entonces pueden consumir más. Entonces, un mayor crecimiento del PIB, se ve reflejado en mayor consumo y en mayor capacidad de adquisición de las personas”, precisa la web.
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