Itinerario Político
QUERÉTARO, Qro., 29 de diciembre de 2014.- El obispo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, pidió a los fieles ser testigos vivos de la salvación en medio de las tinieblas, la violencia, la corrupción, la injusticia, la pobreza y el dolor de México.
En su mensaje de fin de año, el obispo reconoció que la realidad por la que México atraviesa “tiende a nublar” el resplandor de las manifestaciones del amor de Dios, pero exhortó a no perder la esperanza.
“Quiero invitarles para que en esta feliz ocasión de comenzar un nuevo año, nos dejemos cautivar por este amor y seamos así, testigos vivos en medio de las tinieblas, de la violencia, de la corrupción, de la injusticia, de la pobreza y del dolor. No podemos construir la historia de nuestra ciudad y de nuestros pueblos, ajenos a la historia de la salvación”, afirmó.
Señaló que frente al contexto que vive México, irrumpe de manera sorprendente la novedad gozosa y liberadora de Cristo, que permite contemplar la bondad y la ternura.
“A nosotros toca hoy refundamentar una cultura cristiana que sea capaz de mostrar a las nuevas generaciones la única Esperanza, capaz de fundamentar la existencia y ofrecer hoy al hombre el agua viva de la fe”, insistió el obispo.
Armendáriz Jiménez animó a la población a “no perder la esperanza en que las cosas tienen que cambiar, en que nuestra historia debe virar y reorientar su camino, hacia lo que realmente será su destino final”.
“No hay lugar para la angustia frente al tiempo que pasa y no vuelve; ahora es el momento de confiar infinitamente en dios, de quien nos sabemos amados, por quien vivimos y a quien nuestra vida se orienta”, puntualizó.