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QUERÉTARO, Qro., 2 de marzo de 2014.- La Procuraduría General de Justicia del Estado informó que con base en elementos probatorios aportados por el Ministerio Público, el Juzgado Séptimo de Primera instancia Penal de Querétaro, decretó Formal Prisión a Susana Ureña Ramirez y a Nicolás Delgado Cornejo, por su probable responsabilidad en la comisión del delito de homicidio doloso calificado agravado.
El pasado 17 de febrero de este año, se recibió un reporte vía cabina de radio, en el que se informó sobre el hallazgo del cuerpo sin vida de una persona del sexo masculino, en el exterior de un domicilio ubicado entre las calles de Pames y Chalcas de la colonia Cerrito Colorado.
Al lugar se trasladó el Ministerio Público Investigador en turno, acompañado de un grupo multidisciplinario de especialistas, además de agentes de la Dirección de Investigación del Delito, quienes recabaron indicios y testimonios sobre lo ocurrido.
Derivado de las indagatorias realizadas por los agentes investigadores, así como del uso de equipo especializado en la detección de vestigios, se pudo detectar algunas manchas hemáticas que conducían a un domicilio de la misma privada donde se realizó el hallazgo. Al indagar, los Investigadores ubicaron en dicho inmueble a quienes dijeron llamarse Susana Ureña Ramírez y Nicolás Delgado Cornejo, quienes fueron remitidos ante el Ministerio Público en calidad de testigos.
Sin embargo, al rendir su declaración ministerial, ambos incurrieron en diversas contradicciones, por lo que su estatus cambió a la de probables responsables.
Posteriormente, los inculpados aceptaron haber privado de la vida a quien en vida llevó el nombre de Adrián Nueves Hernández. Por lo anterior y con base en los elementos recabados, el Ministerio Público solicitó y obtuvo una orden de cateo al interior del domicilio de la pareja, lugar donde de acuerdo a su dicho se cometió el delito.
En el relato de ambos probables responsables se estableció que la madrugada del lunes 17 de febrero, se encontraban en compañía del hoy occiso ingiriendo bebidas alcohólicas, cuando en un momento determinado, Susana Ureña Ramírez y Nicolás Delgado Cornejo, discutieron con la víctima a quien lesionaron en múltiples ocasiones con un arma blanca, principalmente en la espalda y cuello.
Acto seguido, según indicaron, abandonaron el cuerpo sin vida de la víctima en plena vía pública y regresaron a su domicilio para eliminar cualquier indicio que pudiera señalarlos como probables responsables del homicidio.
Un vez que los especialistas de la dirección de Servicios Periciales emplearon diversas prácticas en medicina forense, fue posible establecer que la causa de muerte fue choque hipovolémico secundario a herida producida por un arma blanca.